El miércoles pasado declaró ante la Justicia el peón rural de Salto que fue agredido a rebencazos por parte de su patrón y el capataz de la estancia en la que se desempeñaba.
Al salir del juzgado, Hugo Leites, la víctima de la agresión, desmintió las versiones que señalaban que había sido motivada por un caso de infidelidad. "Son todos chusmeríos", señaló y dijo que también fue perseguido por el dueño de la estancia con un cuchillo, amenazado de que no realizara la denuncia y obligado a firmar papeles en blanco.
Los "chusmeríos" a los que se refería el trabajador son una serie de audios grabados supuestamente por personas vinculadas a la estancia en cuestión, en los que se asegura que el peón fue "castigado" no por exigir pagos que le correspondían sino por haberse "metido" con la pareja de quien lo azotó.
El abogado de Leites, Gabriel Cartagena, hizo alusión a este caso ayer en diálogo con No está todo dicho, de Radio Montecarlo. El letrado señaló primero que él y su defendido serán recibidos por el Ministerio de Trabajo para tratar lo ocurrido.
"Todo esto se da por un tema de relación laboral. No existe ningún otro tipo de elemento porque sé que ha circulado", dijo Cartagena.
Agregó que los rumores molestan no solo a su cliente sino a "las demás partes que se mencionan en los audios". "No existe en el expediente ninguna cuestión de estas. Serán responsables quienes lo hayan publicado", agregó el abogado.
Explicó que ya se identificaron perfiles de redes sociales de Salto en los que circularon estos rumores. "La semana que viene haremos la denuncia correspondiente por difamación e injurias", anunció.
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