Contenido creado por Martín Otheguy
Locales

Delicado por donde se mire

Nuevo informe forense del caso Luciano concluye que el niño murió por asfixia

La defensa de los dueños del local intenta probar que el fallecimiento se produjo por una epilepsia favorecida por alta medicación, pero este nuevo reporte descarta esa hipótesis.

30.05.2018 12:27

Lectura: 5'

2018-05-30T12:27:00-03:00
Compartir en

El caso Luciano, el niño que fuera encontrado muerto en el castillo inflable de un cumpleaños a fines del 2016, reveló contradicciones en los informes forenses que intentan determinar las causas de su muerte.

Los dueños del local de fiestas, sobre quienes pesa un pedido de procesamiento, presentaron un informe forense a cargo del doctor Guido Berro (grado 5) que asegura su muerte no fue por asfixia y que la hipótesis más probable del fallecimiento de Luciano es la muerte inesperada en epilepsia, favorecida por la medicación elevada.

La familia de Luciano, sin embargo, considera que el niño perdió el conocimiento y murió por asfixia luego de que se enrollara el inflable con él dentro. Las primeras pericias forenses habían determinado que el niño murió por asfixia y el médico tratante de Luciano (Raúl Ruggia, neuropediatra grado 5) declaró ante la Justicia que nunca pudo haber fallecido por la medicación ("la sedación no es causa de la muerte", dijo) y que las altas dosis de fármacos post mórtem -según el informe de Berro hay una sobredosis de cinco veces la dosis terapéutica de clobazán- podían deberse a que Luciano tenía un metabolismo lento.

A raíz de estos reportes contradictorios, el juez Hugo Rundie ordenó un nuevo informe del Instituto Técnico Forense (ITF) para llegar a una conclusión sobre las causas de la muerte.

Además, la familia de Luciano solicitó otro informe al médico grado 5 Hugo Rodríguez Almada (director del Departamento de Medicina Legal y Ciencias Forenses). Rodríguez no cobró a la familia por realizar este informe.

En el reporte forense, al que accedió Montevideo Portal, Rodríguez Almada señala que "cabría analizar tres posibles hipótesis de causas posibles de muerte: asfixia mecánica, muerte súbita en epilepsia e intoxicación aguda por clobazán".

Con respecto a la posible asfixia, que es la teoría de la familia, el especialista asegura que es coincidente con lo informado por la médica forense y la patóloga. "Tanto los hallazgos del lugar del hecho, como de la autopsia y de la anatomía patológica orientan a una muerte asfíctica", indica.

"En el caso en análisis, no solo están casi todos los signos clásicos, sino que se agrega el colapso del pulmón referido por la médica forense (...) orienta a un impedimento de la respiración, sea por compresión o por obstrucción. La atelectasia del pulmón, en ausencia de una enfermedad pulmonar grave, también sugiere una asfixia mecánica", señala el médico. El hecho de que el niño estuviera vivo en la fiesta y horas después "fuera rescatado de un juego inflable, que había sido previamente desinflado y plegado (...) potencia aún más el conjunto de los múltiples datos que orientan a una muerte por asfixia mecánica"

Epilepsia

Sobre la posible muerte por un ataque de epilepsia, Rodríguez señala primero que está comprobado que el niño era portador de una epilepsia de difícil manejo, lo que se tradujo en una serie de sucesivas crisis epilépticas e intervalos libres, y que al momento de la muerte estaba medicado con clobazán.

"La muerte súbita en epilepsia es una causa de muerte bien conocida", indica, pero "los distintos autores coinciden en que no se encuentran hallazgos autópsicos característicos. sino que es un diagnóstico de exclusión, es decir, a falta de evidencia de otra causa de muerte". Estas muertes suelen darse "en sujetos jóvenes que presentan niveles sub terapéuticos o ausencia total de anticonvulsivantes en sangre", lo que no se da en este caso.

Sobre la cantidad de medicación encontrada en Luciano, el forense apuntó que "estos valores hay que relativizarlos, ya que no existe relación entre la concentración del fármaco en sangre y su eficacia, por lo que en la práctica el monitoreo es fundamentalmente clínico (se mide la respuesta del paciente y se ajusta la dosis en consecuencia)". De la misma manera, agrega, "el diagnóstico de intoxicación nunca debe ser hecho a partir de un dato de laboratorio aislado de la clínica"

El diagnóstico de intoxicación por clobazán "requiere la presencia de los signos clínicos más la comprobación de niveles de clobazán en sangre mayores equivalentes a 3 mg/l". En este caso, la concentración era superior al rango terapéutico "pero también muy alejada de la requerida para hacer ese diagnóstico". "No es posible concluir que se trató de una muerte súbita por epilepsia", concluye.

Medicación

"El niño estaba en un cumpleaños infantil y no parece razonable plantear que permaneció durante algunas horas exhibiendo signos de una intoxicación aguda por psicofármacos de nivel letal sin que nadie lo advirtiera. Tampoco sería fácil explicarse que, si el niño cayó en el sueño inducido por psicofármacos en la cama elástica, haya sido hallado posteriormente en otro sector del salón, envuelto en el inflable ya desarmado y plegado", dice Rodríguez.

Con respecto a la muerte por exceso de medicación, "el análisis médico legal detallado no permite sostener la intoxicación por clobazam como la causa de muerte". "A lo sumo, y también a título conjetural, podría plantearse la posibilidad de que una hipotética somnolencia como efecto colateral del clobazam haya facilitado la muerte por asfixia mecánica, al disminuir la reactividad y las posibilidades de reacción de la víctima", agrega.

En conclusión, "la interpretación armónica y racional de todos los elementos disponibles son coincidentes en que se trató de una muerte por asfixia mecánica".

Del otro lado

El informe no concuerda con el de Guido Berro, contratado por la defensa de los dueños del local. Berro concluye que "la hipótesis más probable es que el fallecimiento de Luciano fue debido a muerte inesperada en epilepsia, favorecida por medicación depresora del SNC en dosis elevada, prácticamente descartando la asfixia mecánica por sofocación facial, compresión tóraco-abdominal, confinamiento o postural, por la ausencia de sus características tan evidentes en esos casos".