Lasalvia: “Con Ferreyra en el VAR, sabía que anulaban el gol. Siempre favorece a Nacional”

Edgardo Lasalvia, representante de futbolistas y asesor deportivo del grupo gerenciador de Miramar Misiones, lamentó el arbitraje del partido que su equipo perdió 2-1 con Nacional en el estadio Luis Franzini, donde le anularon un gol por un fino offside cuando estaban 1-1.

“En la cancha fue un golazo. Después, trazando las líneas y estando Christian Ferreyra en el VAR, sabía que iban a anularlo. Seguro. Siempre favoreció a Nacional”, disparó el Chino Lasalvia en diálogo con el programa 100% deporte de Sport 890.

“El trazado de las líneas no sabía si lo hizo Christian Ferreyra o el hijo con la mano. Por un hombro o por medio milímetro, el VAR arruina el fútbol”, sostuvo, y luego agregó que “el VAR mató el fútbol y les dio herramientas a los corruptos”, argumentando que “en la época de [Eduardo] Dluzniewsky, [José Luis] Da Rosa y Julio Matto, esto no pasaba”.

“Cuando estuve en otra parte del fútbol puse hasta dinero para intentar corromper a un juez. Hasta en cana podía ir”, recordó el exbarrabrava de Peñarol. “Hay corrupción en el fútbol uruguayo y siempre la hubo. No sé si me robaron o si esa guita se fue para otro lado, pero esa colecta era para un árbitro en un Peñarol-Nacional, hace como 10 años”, contó.

“A llorar al cuartito. Siempre les toca a los equipos chicos y Miramar tiene que seguir trabajando. Esto pasó siempre, a veces para el lado de Peñarol y hoy para Nacional. Lo felicito a Alejandro Balbi, que es el que tiene el poder y las fuerzas a nivel político. La alegría va por barrios. Es un crack políticamente y hoy maneja el fútbol uruguayo”, añadió.

“Peñarol también ganó choreando, mil veces, y ahora le toca a Nacional hace unos cuantos años. Y dependiendo de quién la tenga un poco más larga, es el que va a ganar los próximos años”, agregó Lasalvia, quien estuvo en el Franzini y recibió insultos de “unos pocos envidiosos de Nacional”. “Me insultaban porque no toleran la superación de otras personas. Quieren que siga siendo un gordo barrabrava. Igual nos conocemos todos. Era mirarlos a la cara un poquito fijo y se arrepentían enseguida”, concluyó.