Gemelos idénticos hasta en ADN se niegan a confesar cuál es el padre de un niño

Ya que ninguno quería ser padre, lo serán los dos. Así lo entendió el tribunal de Goiás, en Brasil. Dos hermanos gemelos identificados como Fernando y Fabrício - nombres ficticios - rechazan aclarar cuál de ellos es el padre de una niña cuya madre tuvo un breve affair con uno de ellos; o, quizás, con los dos.

Como las pruebas de ADN fueron inconclusas (siendo gemelos univitelinos, es decir, nacidos del mismo óvulo fertilizado por el mismo espermatozoide, en ambos la prueba dio 99,9 por ciento de probabilidad positiva de ser padres de la niña) el juez decidió que cada uno de ellos va a pagar la pensión de alimentos obligatoria, que corresponde a un tercio del salario mínimo brasileño. Así, optó por beneficiar doblemente a la niña en vez de privarla de su derecho.

Según informa el periódico Expresso, los gemelos siempre aprovecharon su apariencia idéntica para hacer trucos. En la infancia se trataba de bromas inocentes, pero más tarde pasaron a situaciones más graves, involucrándose ambos en relaciones que iban manteniendo con mujeres, las cuales no siempre se daban cuenta de que tenían más que un novio.

En el caso de la mujer que ahora fue a la corte exigir los alimentos (que dijo que el novio se presentaba como Fernando pero usaba la motocicleta de Fabrício), los hermanos supusieron que bastaba crear una duda insoluble para librarse de la paternidad. Pero el juez no lo aceptó.

"Uno de los hermanos, de mala fe, busca ocultar la paternidad", escribió el magistrado. "Semejante comportamiento, por cierto, no debe ser aceptado por el Poder Judicial que, por el contrario, debe reprimir comportamientos ilícitos, como en el caso en que los requeridos, que buscan beneficiarse y privar a la denunciante de sus derechos"

Para desarrollar su argumento, el juez invoca el concepto de multiparentalidad biológica. "La multiparentalidad, normalmente, ocurre entre una filiación biológica y una afectiva, dando, pues, la doble paternidad genética o biológica. Y el caso, en ese aspecto, goza de cierta particularidad, pues no es a menudo que se encuentra en un proceso de reconocimiento de paternidad la existencia de dos personas, posibles padres, con el mismo ADN ".

"Así, ante las peculiaridades del caso concreto, considero que la decisión que más se acerca al concepto de justicia, es aquella que privilegia los intereses y derechos del niño, en detrimento de la mala fe de los requeridos", concluye el juez.