El fin de una amistad puede ser más difícil que el de un amor

Existe un archivo inagotable de literatura, películas, música o arte sobre el momento doloroso que es el fin de una relación amorosa. Cada canción que suena en la radio parece hablar de tu corazón roto. Sin embargo, cuando se trata del final de una amistad, la música no suena, las luces de la sala se apagan y se produce un cierto desamparo.

Un estudio del Departamento de Psicología de la Universidad de Michigan, en Estados Unidos, sostiene que las amistades van asumiendo una mayor importancia a medida que vamos creciendo. Y que, como adultos, son un indicador más fuerte de bienestar emocional que las relaciones familiares.

Si asumen este papel determinante, ¿por qué no hablamos de qué hacer cuando una amistad se termina? "Porque existe la expectativa de que las amistades son simples cuando somos adultos, y en la mayoría de los caso eso no es verdad", explica terapeuta Miriam Kirmayer en declaraciones a la revista Time

Los altos y bajos -y el fin, cuando no hay más remedio- de una amistad pueden costar más que terminar una relación. Estas son algunas de las razones.

La vergüenza porque ya no funciona

Como el fin de una amistad no es discutido con la misma frecuencia que el de una relación amorosa, a menudo se produce un sentimiento de fracaso que acaba por apoderarse de la situación. "Las personas sienten que deberían haberlo resuelto, sienten que son las únicas a las que les pasa eso. Y no es verdad ", dice Kirmayer. También está la idea preconcebida de que una amistad dura toda la vida y, según la terapeuta, hay que tener una visión más realista de la amistad, para lidiar de forma natural con un posible fin. Y, sobre todo, ese final no significa necesariamente que fuimos malos amigos, sólo significa que la relación no estaba funcionando.

Tenemos demasiadas expectativas

La psicóloga Marni Feuerman explica la diferencia importante entre amigos y compañeros. "Cuando asumimos una relación de pareja el camino queda trazado: salir, casarse, tener hijos. Hasta se firma un documento que marca la unión. No es lo que pasa con los amigos. No hay esa línea tan definida", dice en declaraciones recogidas por el periódico lisboeta Diário de Notícias. Es decir, en una amistad es posible que ambas personas se manejen con distintos niveles de dedicación, y ese desequilibrio resulte en una separación. "No queremos expresar nuestras necesidades y verlas rechazadas", dice Feuerman, "preferimos quedarnos callados y dejar pasar". Esta falta de comunicación puede lastimar a ambos, ya que el otro puede cuestionarse lo que pasa o lo que hizo mal.

¿Cuáles son los términos del final de una amistad?

cuando nos separamos de una pareja, conversamos sobre la posibilidad de quedar como amigos, de ‘darse un tiempo' o de romper sin más y si te he visto no me acuerdo. Cuando una amistad termina, estos términos están menos definidos. "Hay mucha confusión en estos momentos. ¿Podemos seguir formando parte del mismo grupo de WhatsApp? ¿Podemos vernos en eventos sociales? ¿Borramos todos los recuerdos hasta ese momento? Estas preguntas sin respuesta pueden conducir a situaciones embarazosas y sufrimientos innecesarios para ambas partes ", dice Feuerman.

No sabemos qué decir

La terapeuta afirma que tendemos a creer que una amistad termina cuando "existe una gran traición, o una situación de esas en las que es fácil encontrar un motivo causado por la otra persona". Sin embargo, a menudo sucede que simplemente se toma por caminos diferentes, ya sea por factores externos, como distancia o estilos de vida distintos, o porque divergen en opiniones. En estos casos, es difícil tomar la iniciativa de conversar y poner un punto final en la relación. En un noviazgo, necesitamos ese momento para sentir que el ciclo se ha cerrado. En una amistad, puede parecer confuso y doloroso tener que hacerlo y, por eso, optamos por el silencio.