Taylor Hindery (30 años) viajó hasta la Florida con su esposa Esmerald (31 años) buscando ver algunos caimanes. Los turistas, originarios de Springfield, decidieron subirse a un bote junto a otra pareja para hacer fotos y videos del paisaje.

Ninguno imaginó que la aventura los enfrentaría a un enorme caimán, que quedó atascado entre las barandas de su embarcación al intentar volver al agua.