Aunque la moka italiana —también conocida como cafetera greca— es un ícono del café casero desde hace décadas, muchas veces el resultado no es el esperado: café demasiado amargo, con sabor a "quemado" o con una intensidad que oculta los matices. La buena noticia es que, según especialistas, esto no es culpa del café ni de la cafetera en sí, sino de cómo la usamos.

El experto colombiano @lychecafecito, conocido en redes por su enfoque pedagógico sobre café de especialidad, explica en un video viral cuáles son los errores más frecuentes al usar la moka y cómo evitarlos para lograr una taza balanceada, intensa y sin amargor.

El error más común: el agua

Uno de los fallos más habituales está en la temperatura del agua que se coloca en la base:

“Si usas agua muy caliente, el café subirá demasiado rápido y quedará ácido; si usas agua fría, subirá lento y el resultado será amargo”, explica el barista.

Lo ideal es usar agua tibia, entre 55 °C y 65 °C. En muchos hogares, el agua caliente del grifo alcanza cerca de esos valores, por lo que se puede usar directamente si se prueba antes con la mano o un termómetro de cocina.

Además, se recomienda llenar la base justo por debajo de la válvula de seguridad, sin sobrepasarla.

El café: ni prensado ni muy fino

En cuanto al café molido, el especialista sugiere usar una molienda media-fina (como la que suele venir en paquetes para moka) y llenar el filtro sin prensar. "Solo nivelar con una cuchara o con el dedo, sin compactar", aclara.

Un café muy fino o apretado dificulta el paso del agua y produce sobreextracción, que genera amargor.

El fuego: bajo y controlado

Otro factor clave es la intensidad del fuego: “Pon la moka a fuego bajo. Si vas con apuro, usá medio-bajo, pero nunca medio o alto”, recomienda.

La tapa puede mantenerse abierta para observar el inicio de la extracción. Cuando comienza a salir el café, se puede reducir aún más la temperatura para alargar la extracción y lograr un perfil más suave.

El truco final: cortar la extracción

El detalle que muchos desconocen es que dejar la moka en el fuego hasta que termine de burbujear puede sobreextraer el café, lo que genera notas amargas. La solución: apenas empiece a salir espuma, retirar del fuego y colocar la base bajo agua fría del grifo.

Este paso corta la extracción inmediatamente, conservando los mejores aromas del café sin arrastrar los compuestos más amargos que suelen salir al final.

Revolver antes de servir

Antes de verter el café, se recomienda removerlo con una cucharita dentro del depósito superior. Esto integra los diferentes niveles de extracción y mejora la consistencia de la taza.

Con información de Europa Press.