Un hombre de 27 años sufre de una enfermedad rara que le hace experimentar síntomas parecidos a los de la gripe cada vez que eyacula. Por esa razón, y luego de que su historia se hiciera conocida, se ganó en redes sociales el mote de: “el hombre más desafortunado del mundo”.
El caso del hombre —cuya identidad no se divulgó— fue informado recientemente en la revista médica Urology Case Reports por un equipo de médicos que lograron tratar la afección con antihistamínicos.
Los científicos describieron la rara enfermedad del hombre como una respuesta alérgica o autoinmune a su propio esperma, que le provocaba síntomas similares a los de la gripe, como fiebre, tos, estornudos, debilidad muscular, así como problemas de concentración, memoria e incluso del habla. Debido a estos síntomas debilitantes asociados con su propio orgasmo, durante mucho tiempo el hombre había evitado tener sexo con su novia.
Por extraño que parezca, el caso no es único. Hasta el momento, los científicos han descubierto casi 60 casos de personas afectadas por esta rara y grave afección, conocida como síndrome de enfermedad posorgásmica (POIS, por sus siglas en inglés). De hecho, se reconoce cada vez más como una causa debilitante de disfunción sexual en los hombres, pero debido a que es tan rara e inusual, a menudo no se diagnostica o se la confunde con otras patologías.
“Muchos prestadores de salud no la conocen, y mucho menos el público”, dijo el doctor Andrew Shanholtzer, de la Facultad de Medicina William Beaumont de la Universidad de Oakland, coautor del informe del caso. “Es más que probable que esté subdiagnosticado y que haya muchos enfermos por ahí”, apuntó.
Shanholtzer explicó que, si bien se desconoce la causa exacta de POIS, se cree que su inicio sobreviene después de una infección o lesión en los testículos, algo que provoca la filtración de cantidades microscópicas de esperma en el torrente sanguíneo, lo que desencadena una respuesta inmunitaria.
“Hay unas células especiales llamadas células de Sertoli que nutren y rodean al esperma y lo mantienen aislado de las células inmunitarias. Si estas células se dañan, el esperma se expone al sistema inmunitario y este, al no reconocerlo, lo ataca como si fuera un virus o una bacteria invasora”, detalló el profesional.
En el caso reportado en el informe, los investigadores describieron que los síntomas comenzaron cuando el paciente tenía 18 años. Durante los siguientes nueve años, abandonó por completo el sexo debido a la tos, secreción nasal y estornudos, así como la urticaria que le cubría los brazos cada vez que llegaba al orgasmo.
El paciente consultó a varios médicos, desde urólogos hasta expertos en enfermedades infecciosas, pero nadie podía explicar qué le estaba pasando. Le recetaron antibióticos, pero estos no mejoraron su condición en absoluto.
Afortunadamente, después de diagnosticarle síndrome de enfermedad posorgásmica, el doctor Shanholtzer y sus colegas pudieron tratarlo con varios antihistamínicos, uno de los cuales (fexofenadina) hizo que sus síntomas disminuyeran en un 90%.t
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