Santullo (1979), autor de novelas gráficas, guionista de historietas, editor y periodista, rompe con algunas coordenadas del género policial y, sin embargo, se sirve de este formato para presentar una narración que respeta algunos lineamientos del género, con un toque de humor y costumbrismo.

Félix Niemeyer, el protagonista, es un detective treintañero al que pocos toman en serio. Ha leído muchas novelas policiales y de ellas ha tomado el modelo para crearse a sí mismo, aunque poco tiene que ver con el estereotipo de investigador rudo, melancólico y solitario.

Esta novela obtuvo una Mención con Diploma de Honor en el 19º Premio Nacional de Narrativa "Narradores de la Banda Oriental".