Para millones de personas en todo el mundo, las pascuas son una celebración religiosa, al igual que para otros tantos millones es la ocasión para comer chocolate a más no poder.

Para Miranda Kerr, es la ocasión de transformarse en una infartante conejita.

Ataviada con una lencería de alto voltaje, Miranda se contonea sensualmente entre canastitas y huevos de pascua, para deleite y desesperación de un conejo tamaño humano.

El video, que está dedicado a la modelo en el día de su cumpleaños, fue realizado por la revista Love.

El pasado viernes, la modelo publicó en Instagram un fragmento de la pieza.