Contenido creado por María Noel Dominguez
Inspiradoras

La prefiero compartida

La Generación Z revive las mesas compartidas como espacio social y antídoto digital

Un estudio revela que los jóvenes priorizan la socialización sobre la privacidad en restaurantes.

19.11.2025 07:24

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2025-11-19T07:24:00-03:00
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Lo que durante años pareció una práctica en retirada —compartir mesa con desconocidos en restaurantes— está siendo reivindicado por la Generación Z como un nuevo espacio para la socialización auténtica. En un contexto marcado por el exceso de interacción digital y la creciente necesidad de vínculos cara a cara, los jóvenes están devolviendo protagonismo a las mesas comunales, muy populares en los años 2000.

Así lo confirma un reciente estudio gastronómico realizado por DKC Analytics, que encuestó a 1.000 adultos en Estados Unidos. El informe señala que el 90?% de los jóvenes entre 18 y 29 años disfruta comer en mesas compartidas, una cifra muy superior al 60?% registrado entre los Baby Boomers.

Comer para conocer (y reconectar)

La motivación detrás de esta tendencia no es nostálgica, sino social. Para la Generación Z, comer en una mesa compartida no es una concesión práctica, sino una elección consciente: prefieren renunciar a la privacidad si a cambio pueden generar nuevas conexiones.

Entre los hallazgos más destacados:

  • 1 de cada 3 jóvenes afirma haber hecho una amistad en una mesa compartida.
  • 1 de cada 7 reconoce que esta experiencia derivó en una cita.
  • El 63?% considera que es un buen lugar para conocer gente nueva.
  • La mitad dice haber tenido “conversaciones memorables” con desconocidos durante una comida.

Ciudades como Washington D. C., Nueva York y Chicago lideran este regreso, según el estudio.

Más allá de la moda: una respuesta a la vida hiperconectada

El informe apunta a un fenómeno más profundo que un simple revival estético: la necesidad de escapar del aislamiento que generan las pantallas. En este nuevo contexto, la mesa compartida se convierte en un símbolo de resistencia y reapropiación del espacio público como entorno de encuentro humano.

Comer sin móvil, entablar conversación con quien se tiene al lado, compartir el momento sin filtros ni “likes”: todo esto forma parte de una experiencia que la Generación Z considera valiosa y significativa.

Además, esta tendencia tiene ventajas operativas para la industria gastronómica: mejor gestión de aforo, rotación más ágil de comensales y una atmósfera más viva y social.

Con información de Europa Press