Caroline Westlake, quien fue hasta hace poco la encargada de atender a los suricatos en el Zoológico de Londres, fue condenada a pagar una indemnización a Kate Sanders, quien trabaja cuidando a los monos en el mismo establecimiento.

Según la prensa local, ambas mujeres se fueron a las manos durante una discusión que involucraba a Adam Davies, cuidador del recinto de las llamas, y que había salido con ambas mujeres. En el transcurso de la disputa, Westlake arrojó un vaso con vino a su rival.

La pelea se produjo el pasado 8 de diciembre durante la fiesta de despedida de año de los trabajadores del zoo, por lo que el altercado fue presenciado por todo el personal. Sanders inició luego acciones contra su agresora, acusándola de causarle una "desagradable lesión" en el rostro.

El juez Jeremy Colman, de la Corte de Magistrados de Westminster condenó a Westlake pagar 800 libras (algo menos de 36.000 de nuestros pesos) a su adversaria, y a un año de tareas comunitarias.

La violenta mujer justificó su conducta asegurando que Sanders le pegó primero un puñetazo, y dijo no recordar el momento en que le lanzó el vaso. Sin embargo, su versión no fue creída por la dirección del zoo, que la despidió pocos días después del incidente.