Historia del día de San Valentín

La celebración de San Valentín pasa bastante inadvertida en Uruguay, pese a los esfuerzos de marcas y empresas para aprovechar el filón comercial de la celebración del amor. Más allá de un incremento natural en la venta de flores, chocolates y regalos en general, no adquiere aquí el estatus cultural que tiene en el hemisferio norte, donde es un motivo de celebración casi obligado para quienes están en pareja y cuenta con una maquinaria de promoción perfecta a nivel de televisión y cine.

La historia de esta celebración se remonta al Siglo III, en épocas del emperador Claudio II. San Valentín era un sacerdote que se opuso en secreto a la prohibición de los matrimonios entre jóvenes (que impuso Claudio bajo la creencia de que los solteros sin familia eran mejores soldados).

El sacerdote celebraba en secreto matrimonios para jóvenes enamorados, hasta que el emperador se enteró y lo mandó llamar a Palacio. Como Valentín aprovechara para hacer proselitismo del cristianismo, el emperador dio orden de que lo encarcelasen.

Según cuenta la leyenda, uno de los legionarios (Asterius) encargados de custodiarlo, quiso ponerlo a prueba y ridiculizarlo. Le retó a que devolviese la vista a una hija suya, llamada Julia, que nació ciega, lo que el sacerdote efectivamente hizo.

El milagro obró la transformación en Asterius y su familia, convertidos a partir de allí al cristianismo. Pese a ello, Valentín siguió preso y el emperador Claudio II finalmente ordenó que lo martirizaran y ejecutaran el 14 de Febrero del año 270. La joven Julia, a quien había devuelto la vista, un almendro de flores rosadas junto a su tumba, que se convirtió desde entonces en símboplantó lo del amor.

Los restos mortales de San Valentín se conservan actualmente en la Basílica de su mismo nombre, en la ciudad italiana de Terni (Italia), donde cada 14 de febrero se celebra un acto de compromiso por las parejas que quieren contraer matrimonio al año siguiente.

Esta fecha fue tomada luego por el Papa Gelasio para honrar a San Valentín entre el año 496 y el 498 después de Cristo, aunque la costumbre de intercambiar regalos entre los enamorados llegaría recién a mediados del Siglo XV en Francia e Inglaterra.

Para el Siglo XVIII la costumbre había llegado a Norteamérica, que convirtió la fecha en una iniciativa con valor comercial. Por ejemplo, a mediados de Siglo XIX ya se producían en serie y se comercializaban las primeras postales alusivas al Día de San Valentín.