Kendall Murphy y Jessica Padget iban a casarse este año, pero la tragedia se interpuso en sus planes. Él era bombero voluntario, y fue atropellado por un colega que conducía bajo los efectos del alcohol, según informara Fox News.

El pasado 28 de setiembre, día en que estaba prevista la boda, Jessica se enfundó el vestido de novia que no había tenido ocasión de usar y llevó adelante una ceremonia de boda en ausencia de su ser amado. Su familia y la del difunto joven participaron del emotivo momento.

El extraño casamiento póstumo se llevó a cabo en el cementerio donde descansan los restos de Murphy, en el condado de Daviess, Indiana.