JaVonne Hatfield trabajó hasta hace poco como conserje de un hotel, pero últimamente forma parte de uno de los "clubes" más populares del mundo: el de los desempleados.

El muchacho aprovechó el cambio forzado para plantearse un giro en su vida: decidió que quería convertirse en bailarín, y transformó un puente sobre la autopista de entrada a San Francisco en plataforma para trasmitir su mensaje.

Su idea es confortar a las personas cariacontecidas que cada jornada pasan por el lugar, según explica en su video.