Contenido creado por Gerardo Carrasco
Curiosidades

Pensar con la cabeza

Desarrolló sus músculos con pesas y quiso hacer lo mismo con su pene. Terminó internado

Ocurrió en India. El hombre introdujo su falo en el orificio de un disco de tres kilos y luego no lo pudo retirar.

25.09.2023 15:25

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2023-09-25T15:25:00-03:00
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Un entrenador y fisicoculturista terminó hospitalizado luego de intentar desarrollar su miembro viril con el mismo método que había usado con éxito con el resto de su cuerpo: levantar pesas.

Según consigna Daily Mail, el joven de 24 años “introdujo su pene flácido en el orificio de un disco de tres kilos”. Esa fue la parte fácil del ejercicio y, una vez conseguida, el deportista siguió adelante con su plan: intentó excitarse sexualmente —el informe no dice cómo— para que su miembro se irguiera y, una vez logrado eso, hacer levantamiento de peso.

Cuando su falo quedó calzado a presión en el agujero, el culturista no se preocupó, ya que eso le facilitaba su propósito. Así, y a pesar de sentir un dolor leve y notar un poco de hinchazón, se lanzó a sus inéditos intentos de “halterofilia íntima”.

“Después de un tiempo, cuando la intensidad del dolor y la hinchazón aumentaron en el pene, intentó quitar la pesa y no pudo hacerlo, entonces entró en pánico y decidió visitar al médico”, se lee en el informe elaborado por los facultativos que se ocuparon de su caso, que fue publicado en la revista especializada Urology Case Reports.

El artículo detalla que el hombre llegó al hospital dos horas después de que notó el atascamiento, trasladado por algunos familiares.

Los urólogos describieron su pene como “aprisionado” y compartieron imágenes del inflamado miembro.

Los intentos de deslizar el disco con un gel analgésico no tuvieron éxito, al igual que los medicamentos y los esfuerzos quirúrgicos iniciales.

Finalmente, se las ingeniaron para reducir la hinchazón y retirar la pesa. El paciente recibió el alta al día siguiente.

Los casos de personas que requieren atención médica por introducir el falo en sitios inapropiados no son tan raros como podría pensarse, tal como lo sugieren este ejemplo y este otro.

En este último caso, la originalidad estriba en que el paciente no intentaba obtener placer sexual, sino desarrollar musculatura en esa parte del cuerpo.