Conejo minusválido camina gracias a prótesis casera

"La vida en la granja obliga a veces a tomar decisiones difíciles", cuenta Sonja Ambrosino, propietaria de un establecimiento en el norte del estado de Nueva York.

En las últimas semanas unas seis conejas dieron a luz, e hizo falta prodigarse en atenciones debido a las bajas temperaturas, que mataron a varios de los recién nacidos. Junto a su amiga Christine Griffith se encargaron de abrigar y alimentar con biberón a varios de los conejitos.

"M encontré a este pequeñín en el granero. Estaba rígido y medio congelado, así que lo metí en casa. Al cabo de unos días se alimentaba con normalidad, pero era incapaz de mover las patas traseras, parecía paralizado desde el vientre hacia abajo", narra Ambrosino.

"En casos así, lo normal es sacrificar al animal para terminar con su sufrimiento, pero él no parecía sentir ningún dolor. Incluso se arrastraba sobre sus patas delanteras y se movía igual o más rápido que los otros cachorros", detalla.

Así, Christine decidió darle una manito al bebé: compró en una tienda una patineta en miniatura al precio de un dólar, y luego confeccionó una suerte de calcetín una suerte de funda con la que colocar el patín.

El resultado es una prótesis casera que permite al conejito desplazarse con mayor facilidad.