Cincuenta sombras de Grey se cobra su primer divorcio

La saga de novelas erótico sadomasoquistas "Cincuenta sombras de Grey", se convirtió en menos de un año en un fenómeno de ventas sin precedente en el mercado británico, y una de las sagas más vendidas también en el resto del mundo.

Calificado como "porno para madres", la serie creada por E. L. James narra con lujo de detalles la intensa vida sexual de un poderoso empresario y su amante, una joven estudiante de letras.

El explícito libro supo cosechar críticas entre los sectores más conservadores. Si inclusión o no en las bibliotecas públicas fue tema de controversia en Estados Unidos, mientras que un grupo de feministas inglesas alentó una quema de ejemplares, alegando que el contenido de la obra era violencia de género disfrazada de erotismo.

En los últimos días, Cincuenta sombras de Grey volvió a los titulares de la prensa británica, tras integrar la lista de argumentos utilizados durante un juicio por divorcio.

Amanda McAlister, la abogada de la mujer que solicita el divorcio, explicó al periódico Daily Mail que su clienta quedó maravillada con las experiencias sadomasoquistas que relata el libro y trató de llevarlas a la práctica con su marido. Éste se negó en redondo y culpó "al maldito libro" de los nuevos ímpetus sexuales de su esposa.

La abogada sostiene que si bien antes "eran los hombres quienes se quejaban de que no tenían suficiente diversión en la cama", ahora "son las mujeres las que llaman aburridos a sus hombres después de leer libros como Cincuenta sombras de Grey."
En su argumentación ante el tribunal, la profesional tacha a al marido de su defendida como un "soso".

Al parecer, el hombre aceptará que el suyo "no es un comportamiento razonable" para evitar que se discutan en juicio los detalles de su vida sexual.