Arrestan en EEUU al “pervertido del queso suizo”

Al parecer, el olfato de la policía de Filadelfia ha sido lo suficientemente fino como para rastrear el olor a queso suizo y partes pudendas hasta la puerta de un hombre que fuera arrestado ya dos veces por su inusual práctica fetichista.

Fuentes de la Unidad de Víctimas Especiales del Departamento de Policía de Filadelfia indicaron a The Philadelphia Magazine que Chris Pagano es el centro de su investigación, añadiendo que el arresto fue posible después de que varias mujeres se presentaran para a hacer declaraciones que apuntaron hacia la misma persona.

La conducta descrita por las denunciantes coincide con lo registrado en documentos de la corte local y una ficha policial de 2009, donde queda consignado que Pagano, de 41 años, fue arrestado después de que supuestamente "extrajo un gran trozo de queso de su bolsillo" y preguntó a una mujer en la calle si aceptaría "frotar el queso suizo por su pene" a cambio de 20 dólares.

Sin embargo, Pagano ha negado ser el hombre que últimamente ha estado conduciendo por el barrio de Mayfair, haciendo a las mujeres propuestas sexuales que involucraban el ya mencionado alimento lácteo. Algunas fotos tomadas por las mujeres acosadas ayudaron a la identificación.

En ocasión de su arresto del año 2009, Pagano se había declarado culpable de conducta desordenada, pero una solicitud de presentar cargos contra él fue desestimada en la corte.

Un reportero de la antes mencionada revista fue a la casa de Pagano el pasado miércoles para preguntarle si efectivamente él era "el infame pervertido del queso suizo que había estado aterrorizando el barrio Mayfair en las últimas semanas".

Varias mujeres que fueron abordadas por el fetichista, lo describieron como un hombre con sobrepeso y de unos 40 años, que al volante de su coche se acercaba a las mujeres y les mostraba sus genitales desnudos.

Según las denunciantes, luego colocaba una gran rebanada de queso suizo sobre su pene y se ofrecía a pagarles por realizar actos sexuales con él, "queso mediante".
Pagano, quien al parecer es casado, negó rotundamente ser el hombre denunciado. "Lo siento, pero no sé de qué están hablando. A veces la gente me confunde con otra persona", expresó.

Sin embargo, la imagen utilizada por Pagano en su Facebook - que ahora pasó de ser pública a privada - es la misma de un mensaje de la red de contactos OkCupid, enviado a una mujer y sugiriendo las mismas prácticas sexuales cubiertas de queso.

Fuentes policiales citadas por la revista aseguran que además del arresto de 2009, Pagano fue detenido también en 2006 por una situación similar.

Si bien actualmente el hombre conduce un sedán plateado y aborda a las mujeres en la calle, en los casos anteriores utilizaba los sitios de contacto en Internet. Por esa vía, enviaba a las mujeres mensajes inquietantes y perturbadores.

En uno de ellos, narraba con todo detalle sus gustos.

"Me encanta la sensación del queso suizo sobre mi pene, ya sea envolviéndolo en rebanadas o apoyando un trozo grande sobre él", escribió.
"Me gusta todavía más cuando una mujer usa el queso suizo para darme placer. O simplemente coloca fetas de queso suizo alrededor de mi pene y me permite pasar el rato con ella mientras tanto".

En el mensaje, explicaba que prefiere tener sexo con queso sobre sus partes íntimas en lugar de hacerlo de las formas tradicionales. "Tengo suerte en no haberme convertido en un violador" afirmaba, sugiriendo que su obsesión por el alimento le ayudaba a canalizar sus impulsos sexuales de un modo no agresivo.

"Probé con muchos tipos diferentes de queso, Americano, Provolone, Cheez Whiz, Monterrey Jack y Cheddar , pero finalmente me quedé con el suizo porque es el mejor. En primer lugar, porque cuando uno piensa en queso de manera general, la imagen que se aparece en la mente es la del queso suizo. Pero también debido a los agujeros, la textura y la forma en que se siente sobre mi pene", explicaba el hombre, quien se tomaba su fetichismo como un verdadero sibarita.

Si bien tener manías sexuales con queso no es algo ilegal, los problemas del fetichista aumentaron cuando empezó a adjuntar a sus mensajes propuestas económicas. Hoy día, en su etapa actual de "merodeador motorizado" podría afrontar cargos por mostrar sus partes íntimas en la vía pública.

En la extensa misiva antes citada, el sujeto comentaba que el sexo con queso tiene algo en común con el convencional: la energía suele decrecer con la edad.

" Tiempo atrás podía llevar una buena libra y media de queso suizo sobre mi pene, y mantenerla allí varias horas en cada ocasión, antes de llegar al clímax".

Curiosamente, Pagano agrega líneas abajo que no le gusta el queso suizo, sólo la mozzarella, y que nunca se come el queso que utiliza sobre su cuerpo.

"Una última aclaración: no me gusta el queso, a excepción de la mozzarella, y es un queso que nunca he utilizado para sexo", dice el hombre, quien dentro de su curiosa conducta sexual mantiene cierto orden.

"No me como el queso luego de usarlo sobre mí cuerpo, lo tiro. Siempre me preguntan lo mismo", concluye.