Pelín menos famosa que su compatriota y coetánea Giselle Bundchen, la brasileña Alessandra Ambrosio ha participado de los más prestigiosos desfiles alrededor del mundo. Desde el año 2.00 forma parte de la selecta plantilla de modelos de la firma Victoria Secret's, convirtiéndose en una de sus caras más reconocidas.

Alessandra abandonó las pasarelas dos años atrás, cuando quedó embarazada de su hija Anja. Durante la gestación la modelo aumentó considerablemente de peso, lo que suscitó algunos pronósticos agoreros respecto al futuro de su carrera.

Sin embargo, tras dar a luz y transcurrido el período de lactancia, la Alessandra regresó al mundo del modelaje exhibiendo un físico que no recuerda en absoluto su sobrepeso maternal. Tanto empeño puso la brasileña en recuperar la línea, que no faltan quines piensan que se le fue la mano y está demasiado delgada, y exhibiendo un look demasiado juvenil.

"Recuerda más a una adolescente pre púber, que a una madre de 29 años", publicó la cadena ABC en su página web. El comentario no le cató nada bien a la modelo, que está cansada de que la molesten con alusiones a su figura.

"soy delgada desde los cuatro años, pero como todo lo que quiero. Lo único importante es mantenerse saludable", aseguró Alessandra en declaraciones recogidas por The New York Times, y añadió que "si aumento un par de kilos me siento gorda, pesada, enferma, y me sucede más allá de lo que opinen mis agentes o los diseñadores"

Las imágenes adjuntas servirán como argumentos "de peso" para aquilatar la silueta de la hermosa modelo.