Contenido creado por Inés Nogueiras
Libros

Winston Churchill visto por un sudamericano

Juan Martín Allende
Editorial Dunken
2006

Lectura: 4'

2008-12-12T15:23:00-03:00
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Introducción

Este es un relato de la vida de Winston Churchill, gran patriota y defensor infatigable de los intereses de Gran Bretaña. Necesariamente, hemos mencionado hechos y circunstancias históricas del mundo en esa época que, en nuestra opinión, completarán el cuadro.

En este trabajo hemos procurado seguir la recomendación de Churchill: “La Musa de la Historia no debe ser melindrosa. Debe verlo todo, palparlo todo y, si es posible, olfatearlo todo. No debe asustarse de que esos detalles íntimos le hurten el romance y le aminoren el culto al héroe”.

Hemos utilizado las Memorias de Churchill como base para todo lo referido a la Segunda Guerra Mundial. La importancia de estas “Memorias” está señalada por el propio Churchill cuando dice:
“Esto no es una historia, es un caso”. Winston estaba escribiendo el gran alegato para la posteridad, en defensa de los hechos desarrollados durante el tiempo en que fue Primer Ministro.

En el texto nos referimos a Winston Churchill con su nombre completo o simplemente Winston, porque su popularidad era tal que se consideraba el político británico a quien más se lo ha citado también por su primer nombre. Las palabras de su escudo eran: “Fiel pero desdichado”. Nuestro análisis comprueba que fue fiel, pero sus triunfos superaron ampliamente sus desdichas.

Aferrado a sus principios, siempre quiso y logró lo mejor para su patria.

Lo que más nos ha interesado ha sido lo que nos muestra a Winston Churchill como ser humano con sus conclusiones y consejos, sus éxitos y sus fracasos.

También nos ha asombrado la demencial crueldad de las guerras entre las grandes naciones y la contrapartida del progreso cultural y económico de la humanidad para desterrar las autocracias, en procura de su remplazo por las democracias.

A veces hemos dado importancia a las cosas pequeñas que también son parte del conjunto y valen como datos de la realidad.

La vida de Churchill nos induce a reflexionar sobre el progreso del mundo, sus hombres, sus razas, sus inquietudes y su destino.

Además nos hace meditar sobre la importancia que tiene la superación de los conflictos antes que estallen, para permitir que la insoslayable evolución de la vida humana pueda progresar en paz. Hemos nacido para vivir en paz.

También nos hace analizar a la distancia las horribles matanzas provocadas por las guerras y aprovechar los aspectos positivos de las mismas; o sea, toso el progreso científico, industrial y social logrado para una vida mejor evitando el asesinato mutuo y hasta anónimo que resulta de los conflictos armados.

Las distintas encrucijadas de esta vida tan rica apuntan a que necesariamente debemos reforzar los patrones éticos de la convivencia para que ésta no sea afectada por desórdenes indeseables o innecesarios.

¿Será esto algo realista o puramente lírico? ¡De nosotros depende!

No podemos cerrar esta Introducción sin ofrecer una apreciación de las cualidades personales de Winston confirmada por la generalidad de las opiniones de sus comentaristas:

Como político, aunque lo echaran, siguió luchando firmemente para volver y ganar, y lo lograba. Como soldado nunca rehuyó el peligro; al contrario, en él encontraba solaz. Fue amigo de todos, y a veces hasta de sus enemigos. No escatimó esfuerzos en su desempeño. Le tocó actuar en las circunstancias más difíciles. Conoció y trató a los más altos dignatarios del mundo en todo el abanico del poder, reyes, emperadores, los más importantes líderes comunistas, los difíciles revolucionarios irlandeses, los más duros políticos de derecha y a personajes únicos como Charles De Gaulle.

Defendió al Imperio Británico y asistió a su evolución política cuando los países y regiones que lo integraban fueron alcanzando su gobierno propio.

Pensar, avanzar y dejar huella.
Retroceder, jamás.
Mentir, jamás.

Así ha sido Winston Spencer Churchill.