“Feria”, lo nuevo de Fede Graña

Fede Graña, acompañado de su ya casi inseparable banda estable Los Prolijos, regresa con "Feria" (Bizarro, 2013), su nuevo álbum, sucesor de "Ansiedad", su trabajo debut.

"Feria" se presentará en vivo el próximo sábado 23 de noviembre en La Trastienda Club Montevideo (Fernández Crespo y Paysandú), desde las 21 horas.

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Tras su primer disco en solitario, "Ansiedad", el guitarrista, compositor y miembro fundador de Vieja historia, logró encontrar su banda con músicos estables, Los Prolijos.
Más que una banda un grupo de amigos que conforman y le dan una nueva identidad a las composiciones de Graña incluidas en este nuevo disco llamado "Feria".
Un ecléctico compendio de formas y colores que sigue jugando con las tradicionales canciones folk rock pero pasando por la polka, fusiones con música balcánica, funk, entre otros estilos pero con la canción como principal protagonista.

"Feria" fue grabado sin apuros entre octubre 2012 y marzo 2013 en el estudio-hogar de Fede, "San Fruta Records" mediante un método de laboratorio de Fede Graña y Eduardo Campanella. Mezclado por Guillermo Berta en "Basurita" y masterizado en Chile por Joaquín García.

El título llegó tarde, pero el concepto siempre fue el mismo: variedad, cantidad y buen sabor. En una feria pueden convivir una frutería con un zapatero, un plancha con un milico, una pescadería con una señora que vende cachivaches, un quesero con un timbero, un turista con un ladrón y así sucesivamente. De eso se trata. Las canciones van a donde ellas quieren. Y si son buenas para estar en un mismo disco; bienvenidas sean

"Hoy"

"Hoy" es una canción que casi queda afuera de "Feria" si no fuera por la insistencia de Juan Pablo "Colo" Aguirre Zabala (guitarrista de Los Prolijos) de incluirla. Fue la última en grabarse pero casualmente la que abre el disco. Parte de la primera camada de composiciones de Fede en la época del disco debut "Ansiedad", habla sobre una nueva etapa en su vida y carrera. Una reflexión del momento en el que se encontraba, abandonando la noche y las distracciones que conlleva. Apretar el freno para tomar un nuevo camino.