Ryan Said, un joven transexual de 24 años, y Jasmine Merino, una chica trans de 18, se conocieron en Instagram y luego siguieron comunicándose a través de Skype, antes de decidir conocerse en persona.
"Honestamente, creo que fue amor a primera vista", asegura Ryan, quien viajó desde Canadá a California para conocer a la que ahora es su novia.
En un videorreportaje a Barcroft TV, el muchacho cuenta cómo su familia se negó a aceptar su condición y los cambios en su persona, poniéndolo en manos de psiquiatras para que trataran su "enfermedad". Sin embargo, acabaron por entender su situación y él comenzó entonces un ciclo de cuatro años de terapia hormonal.
Jasmine por su parte pasó por un proceso similar, y desde entonces afirma que preferiría tener un novio transexual, alguien a quien ella podría comprender perfectamente y ayudarlo en momentos difíciles.
Ahora ambos planean casarse y tener hijos, utilizando el semen de Jasmine y los óvulos de Ryan.