El episodio se produjo el pasado diciembre, cuando la mujer del acusado, identificado como Luke James Munday, le pidió a su marido, con quien ya tiene dos hijos, que dejara de jugar para cenar con la familia.

La agresión de Munday no fue captada por la cámara, aunque los espectadores escucharon el llanto de la mujer, quien declaró entonces que su pareja le había golpeado en la cara.

Otros jugadores que visionaban la retransmisión llamaron a la Policía para denunciar el hecho.

Munday, que puede ser condenado a un máximo de dos años de cárcel, compareció ante un tribunal de Picton -a 92 kilómetros al suroeste de Sídney- para responder por esa agresión y por una orden de alejamiento y la sentencia será notificada el próximo 26 de agosto.

Con información de EFE