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Salud

Por The New York Times | Alice Callahan

La “pausa” en la palabra “menopausia” podría insinuar que esta etapa de la vida es breve o temporal, poco más que una interrupción molesta. Pero, en realidad, los síntomas asociados a la menopausia pueden durar una década o más y es posible que al menos uno de los síntomas nunca mejore.

Técnicamente, la menopausia empieza luego del último periodo menstrual de una mujer, dijo Stephanie Faubion, doctora y directora de la Mayo Clinic Women’s Health. Pero, debido a que tu última regla no viene con una fanfarria que la anuncie y los ciclos menstruales suelen ser irregulares en esta época de la vida, los especialistas médicos no suelen diagnosticar la menopausia hasta que no hayas pasado un año entero sin menstruar, explicó Faubion. “Luego eres postmenopáusica por el resto de tu vida”, lo cual, observó, puede significar tanto como una tercera parte o la mitad de la vida de una mujer.

En Estados Unidos, la edad promedio del último periodo menstrual es a los 52 años, según el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU. Pero cualquier momento después de los 45 años se considera normal y alrededor del 95 por ciento de las mujeres alcanzan esta etapa de la vida para los 55 años, dijo Faubion, quien también es la directora médica de la Sociedad Norteamericana de Menopausia.

Sin embargo, los síntomas de la menopausia pueden empezar varios años antes del último periodo de una mujer y continuar durante años. La intensidad y la duración de los síntomas puede variar enormemente, dijo Faubion. Algunas mujeres experimentan una leve molestia y otras enfrentan síntomas que interfieren de manera significativa con su vida y su trabajo.

La primera señal de que estás pasando por la transición menopáusica suele ser un cambio en tu ciclo menstrual. Las reglas pueden hacerse más frecuentes o más espaciadas y el sangrado puede volverse o bien más abundante o más escaso, dijo Siobán Harlow, directora del Centro de Ciencia de Mitad de la Vida en la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Míchigan. Estos cambios pueden ser impredecibles y desconcertantes y en las mujeres que experimentan sangrados más abundantes, es posible que esta pérdida sea peligrosa y requiera atención médica, dijo Harlow.

Al mismo tiempo, las fluctuaciones de estrógeno pueden ocasionar que la persona “empiece a tener bochornos, sudores nocturnos, migrañas o no duerma bien o se sienta muy irritable”, dijo Faubion. Luego pueden volver a tener algunos ciclos normales y un alivio en los síntomas seguidos de una resurgencia, explicó. Hay un abanico de síntomas adicionales que también pueden ocurrir en esta transición, entre ellos depresión, ansiedad, niebla mental, cambios en la piel y el cabello, dolor de las articulaciones y sequedad vaginal.

Una vez que pasas 60 días sin sangrar, te encuentras en lo que se conoce como transición menopáusica tardía; de ahí las mayoría de las mujeres experimentará su último periodo en un lapso de dos años, dijo Nanette Santoro, profesora de obstetricia y ginecología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Colorado. En esta etapa “los síntomas tienden a arreciar, así que si eran molestos al principio de la transición, se ponen un poquito peor”, dijo.

Entre los síntomas menopáusicos más comunes se encuentran los bochornos, a veces acompañados de sudoración nocturna; hasta el 80 por ciento de las mujeres los experimentan. En un estudio de 2015 realizado con alrededor de 1500 mujeres estadounidenses que experimentaron bochornos frecuentes o sudoración nocturna, los síntomas duraron en promedio 7,4 años en total, y por lo general comenzaron años antes de la última regla y continuaron en promedio 4,5 años después de esta. Las mujeres que empezaron a experimentar bochornos antes en la transición —antes de pasar 60 días sin periodo— tuvieron que soportar más tiempo estos síntomas, un promedio de 11,8 años. “Si empieza temprano puede resultar ser una menopausia muy larga y molesta”, dijo Santoro. Y, dado esto “puede que quieras buscar atención más pronto que tarde”.

De los varios grupos raciales y étnicos que se incluyeron en el estudio de 2015, las mujeres de ascendencia japonesa y china tuvieron la duración más corta de síntomas de bochorno (un promedio de 4,8 y 5,4 años, respectivamente); las mujeres negras tuvieron la duración más larga, con un promedio de 10,1 años.

En un estudio publicado en febrero, Harlow y sus colegas repasaron pruebas de que las mujeres negras en Estados Unidos también experimentaron, en promedio una menopausia más temprana y mayor incidencia de depresión y perturbación del sueño asociadas a la menopausia si se les comparaba con las mujeres blancas. Las autoras proponen que dichas disparidades podrían estar relacionadas, al menos en parte, con las mayores penurias económicas y el estrés vital, las experiencias con la discriminación y una menor actividad física; todos estos factores, observaron las autoras del estudio, “tienen raíces en el racismo sistémico”.

La mayoría de los síntomas menopáusicos suelen desaparecer luego de un promedio de entre 7 y 9 años, pero alrededor de una tercera parte de las mujeres tendrá síntomas por una década o más, dijo Faubion. Un proveedor de servicios de salud bien informado en la menopausia puede ayudarte a navegar las opciones de tratamiento, que incluyen la terapia hormonal, que puede hacer que los síntomas sean mucho más manejables, añadió. (La Sociedad Norteamericana de Menopausia tiene una base de datos de proveedores aquí).

Uno de los síntomas que no suele mejorar es la resequedad vaginal, que puede ir acompañada también de coito doloroso, una mayor urgencia urinaria y a veces infecciones del tracto urinario más frecuentes, dijo Faubion. Estos síntomas solo empeoran con el tiempo así que vale la pena buscar tratamiento sin demora. Este puede incluir lubricantes de venta libre o humectantes o tratamientos de estrógeno vaginal que se surten con receta, dijo.

Una vez que llegas a la menopausia, dijo Santoro, es técnicamente para toda la vida. Pero sabrás que los cambios de la menopausia ha llegado a su fin cuando sus otros síntomas mejoren. “Simplemente se van”, y algunas mujeres describen una sensación de “placer postmenopáusico” en esta etapa, dijo Santoro. Las fluctuaciones hormonales se estabilizan y para cuando las mujeres llegan a los 65 o 70 años con lo que lidian son más bien con los cambios del envejecimiento que con los de las hormonas reproductivas, dijo Harlow.

Y hay algunas ventajas de atravesar por la menopausia. Por ejemplo, las condiciones dolorosas, como los fibroides y la endometriosis suelen mejorar, y ya no tienes que preocuparte por el periodo o quedar embarazada, comentó Faubion, que también enfatizó que las enfermedades de transmisión sexual siguen siendo un riesgo y una razón para seguir teniendo a la mano condones.

En este sentido, la menopausia es realmente un pasaje de la mediana edad y, aunque puede ser más largo y tormentoso que lo esperado, puedes esperar alivio cuando experimentas su final.

Alice Callahan es una periodista de ciencia y salud.