Un estudio publicado en los últimas días en la revista médica JAMA (Journal of the American Medical Association) muestra que la anafilaxia es un evento "raro" luego de la vacunación contra el coronavirus.
El estudio se llevó adelante luego de que en Estados Unidos se reportaran casos de anafilaxia tras la administración de las vacunas Pfizer-BioNTech y Moderna contra la COVID.
La anafilaxia es una reacción alérgica potencialmente mortal que puede ocurrir después de la vacunación, y que suele aparecer en minutos u horas. "Las tasas de notificación inicial estimadas de anafilaxia en los EE. UU. fueron 11,1 casos por millón de dosis administradas de la vacuna Pfizer-BioNTech (14 al 23 de diciembre de 2020) y 2,5 casos por millón de dosis administradas de la vacuna Moderna (21 de diciembre de 2020 al 10 de enero de 2020)", explica el estudio.
Este análisis actualiza las tasas de notificación de anafilaxia en personas después de recibir la vacuna Pfizer-BioNTech o Moderna, luego de que se vacunaran millones de personas más.
Durante el 14 de diciembre de 2020 hasta el 18 de enero de 2021, se informó que se administraron en los EE. UU. Un total de 9.943.247 dosis de la vacuna Pfizer-BioNTech y 7.581.429 dosis de la vacuna Moderna. Se identificaron 66 casos de anafilaxia: 47 después de la vacuna Pfizer-BioNTech, para una tasa de notificación de 4.7 casos por millón de dosis administradas y 19 después de la vacuna Moderna , para una tasa de notificación de 2,5 casos por millón de dosis administradas.
Los médicos revisores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) concluyeron que las características clínicas de los casos de anafilaxia después de ambas vacunas eran similares, según consigna la revista JAMA.
Los signos y síntomas comunes en los casos de anafilaxia fueron urticaria generalizada, erupción eritematosa difusa, angioedema, síntomas de obstrucción respiratoria y de las vías respiratorias y náuseas.
De los 66 informas, 21 tenían un episodio previo de anafilaxia por otras exposiciones
En 61 (92%) de los casos de anafilaxia, los pacientes recibieron epinefrina como parte del tratamiento de emergencia. Las 66 personas fueron tratadas en entornos de atención médica;
Un 52% fueron atendidos en un servicio de urgencias y 48% fueron hospitalizados (incluidos 18 en cuidados intensivos, 7 de los cuales requirieron intubación endotraqueal).
"No se informaron muertes por anafilaxia después de la vacunación con ninguno de los productos", señala el estudio.
"El monitoreo continuo de seguridad de las vacunas de ARNm COVID-19 en los EE. UU. Ha confirmado que la anafilaxia después de la vacunación es un evento raro", concluye el estudio publicado en JAMA.
"Cuando se consideran en el contexto de la morbilidad y mortalidad por COVID-19, los beneficios de la vacunación superan con creces el riesgo de anafilaxia, que es tratable", prosiguen.
"Debido a la naturaleza aguda y potencialmente mortal de la anafilaxia, la administración inmediata de epinefrina está indicada para todos los casos. Todas las instalaciones que administran vacunas de COVID-19 deben tener los suministros necesarios y el personal médico capacitado disponible para manejar la anafilaxia", finaliza el estudio.
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