BARCELONA CAMPEÓN ESPAÑOL

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Samuel Eto´o nunca tuvo verdaderas chances de lucir en el Real Madrid, en realidad tuvo casi tan pocas como el "Pelusa" Federico Magallanes que también fue de esos jugadores comprados y nunca utilizados por el equipo "merengue".

Ayer, luego de sumar su vigésimo cuarto gol en la Liga y darle el empate del título al Barcelona ante el Levante, el delantero camerunés dio rienda suelta a su alegría. Las celebraciones se trasladaron de la cancha del Levante al estadio del Barsa, y allí, frente a más de cien mil personas y las cámaras trasmitiendo el evento en vivo, Eto´o lanzó su arenga antimadridista por el micrófono que conectaba con la red de sonido del Camp Nou.

"Madrid, cabrón, saluda al campeón" gritó.

La actitud del delantero, vista como ofensiva y desubicada por los medios llevó a una reacción en cadena de búsqueda periodística de reacciones. Así, sobre el mediodía del lunes, el Real Madrid emitió un comunicado informando que no se iba a pronunciar sobre los dichos de Eto´o. El Barcelona también evitó emitir opinión institucional sobre el particular.

De todas formas, la moral y las buenas costumbres parecen emerger luego de la euforia ya que pocas horas después del comunicado del Madrid, el propio delantero camerunés anunció que dará una conferencia de prensa para "pedir perdón".

Goce catalán

La explosión de alegría vivida por los seguidores del superequipo catalán es entendible en el contexto en que se da. No sólo porque hacía cinco años que el equipo no festejaba un título de Liga, sino también por las victorias particulares conseguidas sobre el Real Madrid en esta temporada.

Los dirigidos por el holandés Frank Rijkaard no pueden jactarse de una gran actuación en la Liga de Campeones de Europa, pero por lo menos este año el Madrid tampoco puede. Además el hecho de haber logrado el campeonato en la pelea mano a mano con el archirival y con un ex jugador como principal artillero aumenta la sorna de la victoria.

La alegría está amplificada porque el título es visto como final de una crisis de cinco años en la que varias estrellas circularon sin éxito por el Barsa. "Paso a paso, se vieron los resultados de la cirugía mayor que ejerció Laporta desde su llegada al sillón en el 2003. Y le salió redondito. Porque la salida de varios apellidos fuertes (Cocú, Overmars, Kluivert) fue acertada. Tanto como el préstamo de otros de alto valor: Saviola y Riquelme" señala ho el corresponsal de Olé.

La otra gran superestrella destacada en el título logrado por los catalanes es el astro brasileño Ronaldinho, para muchos la gran figura -por encima de Eto´ó- del Barcelona 2004-2005.

De todas formas, el consenso básico aparece en lo colectivo. "El apoyo colectivo sustentó la temporada. El arco menos vencido de Valdés y una defensa que, como su capitán Puyol, nunca bajó los brazos. En la recuperación (palabra desconocida por el Madrid hasta la llegada de Gravesen) hubo un sorprendente Márquez que mordió los tobillos de todos los rivales. El tándem Xavi-Deco regaló calidad. Todos aportaron algo, como el pibe Messi, que metió un gol en sus primeros pasos y el año que viene tendrá más oportunidades" señala el corresponsal de Olé.

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