Tom Cruise vuelve a Cannes con la última "Misión Imposible": cinco claves de la saga

Tres años después de recibir la Palma de Oro honorífica, Tom Cruise regresa al Festival de Cannes para presentar Misión imposible: Sentencia final, fuera de competición. La película, que podría ser el cierre definitivo de la saga del agente Ethan Hunt, llega acompañada de nostalgia, adrenalina y cifras monumentales. A continuación, cinco claves para entender uno de los fenómenos más longevos del cine de acción:

1. Del televisor al cine global

La saga tiene sus orígenes en la icónica serie de televisión estadounidense Mission: Impossible (1966–1973). Tras un fallido intento de resurrección en 1988, Tom Cruise relanzó la franquicia en 1996, transformándola en un espectáculo cinematográfico global. La transición del formato coral de la serie a la figura central del héroe de acción redefinió el personaje y la narrativa.

2. Tom Cruise, productor y estrella sin relevo

Durante casi tres décadas y ocho películas, Cruise ha sido el alma de la franquicia, con un control total de su desarrollo desde su productora Cruise/Wagner. Su Ethan Hunt es sinónimo de acrobacias reales y escenas memorables —muchas rodadas sin dobles—, consolidando su imagen como uno de los últimos grandes héroes de acción del cine.

3. Directores con sello propio

Cada entrega ha llevado la firma de un director con estilo particular: del suspenso elegante de Brian De Palma al exceso visual de John Woo, pasando por J. J. Abrams y Brad Bird, hasta llegar a Christopher McQuarrie, quien consolidó la saga desde 2015 con un tono más oscuro y frenético. El regreso de De Palma, sin embargo, ha sido descartado por el propio realizador: “seguir es por dinero”, sentenció.

4. Espectáculo global

La saga ha sido una celebración del cine de acción a escala mundial: persecuciones por Londres, peleas en el Vaticano, acrobacias en India, vuelos imposibles en Marruecos. La producción ha combinado lo mejor del espionaje clásico con efectos prácticos que rara vez recurren al CGI.

5. Un negocio millonario

Con más de 4.000 millones de dólares recaudados en taquilla y un presupuesto acumulado superior a los 1.500 millones, Misión Imposible es una de las franquicias más rentables de Hollywood. La primera cinta costó 80 millones; la última, más de 400 millones. A pesar del hermetismo de Cruise, todo indica que Sentencia final será el cierre definitivo, como sugiere un tráiler en tono de despedida.