Susana Romero y sus experiencias místicas

Montevideo Portal

En el jardín de su casa de San Isidro, Susana Romero montó una capilla luego de que años atrás recibiera manifestaciones místicas en esa zona. Esto la llevó a iniciar un camino espiritual que culminó en la presentación de su libro "El amor después de la pena".

En una entrevista a Caras, Romero cuenta cómo comenzó esta nueva etapa de su vida. "Durante mucho tiempo conviví con ruidos extraños, recé y, por suerte, todo pasó. Después comencé a sacar fotos durante las jornadas que yo defino como ‘espirituales’, y al pasarlas a la computadora descubrí lo que los estudiosos denominan ‘caneplas’ u ‘orbs’, que son especies de esferas inteligentes que están en los lugares donde hay amor y mucha espiritualidad. Investigué y me enteré que aparecen en sitios donde rezan el rosario, cuando celebran las fiestas de la Virgen de San Nicolás, irrumpen de a miles en el cielo. A partir de todo lo que me fue sucediendo, llegué a la conclusión de que tengo un privilegio especial", dijo.

Y una tarde, mientras trabajaba en su computadora, escuchó un mensaje que cambió su vida. "Era la voz dulce de una mujer que me decía: ‘En el crepúsculo, hijita. ¡En el crepúsculo!’ En ese momento me di cuenta de que tenía que salir al jardín. El mensaje me lo dio la Virgen en invierno, o sea que yo salía a rezar a las 18:00, pero con el cambio de horario, solía estar frente a ella a las 20:00. En las fotografías, veo cómo su espíritu va subiendo y es impresionante, porque se la ve con el color de la piel humana y con el doble de tamaño de una figura normal", relata.

"Tal vez, los que no me creen piensen que es una foto trucada, y a ellos les digo que no es posible hacer algo así con una cámara digital. No tengo necesidad de mentir ni hacer cosas que no me interesen. Nunca fui una enferma por la fama, en varias oportunidades dejé mi trabajo por cosas que me importaron más", agrega.

Romero confiesa que este camino espiritual "no es un lecho de rosas" sino "un camino muy difícil donde tenés que lidiar con gente escéptica".

"Pero estoy para eso, sé que poseo una misión y la voy a cumplir. No estoy dispuesta a dejar esta vivencia por nada", concluyó.

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