En su programa radial "Cuál es", el conductor Mario Pergolini había destrozado a Sebastián Wainraich a raíz de su "herencia" del programa La Biblia y el Calefón, que condujera en su momento el fallecido Jorge Guinzburg.

"Es increíble que alguien piense que una persona con tan poco talento para conducir como Wainraich, pueda suplantar a alguien tan fuerte como Guinzburg, ¿no?".

La respuesta no se hizo esperar, cuenta La Nación. En diálogo con Luis Majul, dijo que "todo estreno en la tele siempre trae nervios, y además de la carga del programa y de la historia de Jorge, tenía cuatro invitados muy pesados".

"Me chupa un huevo las críticas... Soy el primero en hacérmeles", y aclarando hacia dónde iba el comentario, agregó que "las críticas con buena leche son bien recibidas".

Por último, dijo que "tengo que relajarme un poco, disfrutarlo más, y no respetar tanto a los invitados. Me pareció un digno debut, pero no está mal si me equivoqué. No hay que dramatizar tanto la tele".