la periodista y conductora Cecilia Bonelli y el exfutbolista Darío Cvitanich pusieron fin a su relación de más de 14 años este miércoles.
La noticia fue confirmada por el periodista Juan Etchegoyen de Infobae, luego de hablar directamente con el exfutbolista, quien le aseguró que la separación se dio en buenos términos y “sin polémicas”.
“No hay mucho para contar y son cosas que quedaron entre ella y yo”, le dijo Cvitanich, actual panelista de ESPN. También destacó que, pese al final del vínculo amoroso, mantienen una buena relación por el bienestar de sus tres hijas. “Es una gran mujer y mamá de mis hijas. Así que eso no va a cambiar”, agregó.
La pareja, que siempre optó por el perfil bajo, construyó una familia y una vida en común que incluyó mudanzas a Europa, México y Estados Unidos, además de una boda en 2014 y el nacimiento de sus hijas Lupe, Carmela y Amelia. Su historia comenzó en 2011, cuando él jugaba en Boca Juniors y ella comenzaba a abrirse camino en el periodismo deportivo.
Los rumores de crisis venían circulando desde mayo, cuando en el programa LAM se mencionó que Cvitanich se había ido de la casa familiar. Según el panelista Pepe Ochoa, “el tiempo les generó una crisis. Fue un desgaste. Ella sigue súper enamorada, él no tanto”. El mismo programa aseguró que los vecinos del barrio notaron la ausencia del exjugador y que los movimientos en la rutina familiar ya no eran los mismos.
Bonelli no quiso hacer declaraciones. Tampoco respondió mensajes del programa ni de periodistas que intentaron contactarla, manteniendo el mismo hermetismo que caracterizó a la pareja durante toda su relación.
Después de su última etapa en Miami, donde nació su tercera hija, ambos regresaron a Argentina para desarrollar nuevos desafíos profesionales. Ella sigue vinculada a ESPN como conductora; él se dedica a la representación de futbolistas y colabora como comentarista deportivo.