María Eugenia Ritó admitió este domingo su malestar por no haber sido convocada a la edición 2017 de Bailando por un sueño, que comienza este lunes.

Ritó fue una de las invitadas de Almorzando con Mirtha Legrand y, consultada por Legrand, lamentó la decisión de la producción de Marcelo Tinelli. "Mi nombre era uno de los que se barajaba y por eso no me cayó bien que no me convocaran", dijo, según recoge Diarioshow.

La vedette confesó que desde la producción de Showmatch "le tenían miedo a una recaída" suya, dado que se mantiene en tratamiento para combatir la adicción a las drogas.

"Estoy en un tratamiento ambulatorio, voy dos veces por semana a la clínica, no me da vergüenza decirlo, es algo que le pasa a mucha gente, lo importante es tomar conciencia, es un desafío constante todos los días y son muy importantes los vínculos y el entorno", comentó Ritó en la mesa de los almuerzos.