Natalie Weber contó que hirvió una tanga y qué hizo Mauro Zárate con el agua

En un momento insólito durante el programa Pasó en América, la modelo y panelista Natalie Weber sorprendió al público al confesar que alguna vez hirvió una tanga, siguiendo el mito del “agua de tanga”, una creencia popular en América Latina relacionada con los amarres amorosos.

Según la superstición, el ritual consiste en hervir una prenda íntima usada y ofrecerle esa agua, sin que lo sepa, a la persona que se desea “amarrar” sentimental o sexualmente. Aunque no tiene sustento científico y puede implicar riesgos sanitarios, este tipo de prácticas circulan en el folclore urbano y los medios de comunicación no son ajenos a su difusión, especialmente cuando las celebridades las comentan.

Entre risas, Weber relató: “La herví, estaba limpia. Viste que hay que lavar la ropa cuando la comprás...”. Y ante la pregunta de sus compañeros sobre qué hizo con el agua, respondió: “Me parece que Mauro se hizo unos fideos”.

El relato desató bromas en el estudio, donde se mencionó con ironía que “con razón Mauro está amarrado”. La pareja lleva más de 15 años junta y tiene dos hijos. La confesión, aunque presentada en tono liviano, reavivó en redes sociales el debate sobre la romantización de ciertos mitos y la delgada línea entre el humor y la reproducción de creencias que, en otros contextos, podrían ser problemáticas.