Miley Cyrus volvió a hacer de las suyas durante la entrega de los premios Grammy y esta vez a su amiga Katy Perry.
Durante la celebración, los medios de comunicación pidieron una foto a Miley junto a Katy y la rubia no tuvo mejor idea que posar sosteniéndole un pecho a su compañera.
La cantante, a la que no le hizo ninguna gracia, se mostró seria y con un gesto de enfado para los flashes.
Las malas lenguas comentan que Perry después de su participación en el Super Bowl, tiene una actitud arrogante y se estaría separando de su pareja John Mayer.