Tras ser declarado deudor alimentario y embargado por más de 130.000 dólares, el futbolista Mauro Icardi respondió con dureza a su expareja, Wanda Nara, a través de un escrito judicial que cuestiona su accionar y la acusa de tenderle “emboscadas”.

El documento, presentado por sus abogadas y revelado en el programa Puro show (El Trece), sostiene que Wanda incumple restricciones al exponer el caso en redes sociales y plantea que, si no se le aplican sanciones, debería destinarse una multa millonaria al Hospital Garrahan.

Un cruce que escala en la Justicia y en lo personal

El escrito acusa a Nara de impedir el contacto de Icardi con sus hijas en fechas clave:

“Siempre hay una emboscada detrás de cada movimiento de Wanda”, señala el texto, en el que las letradas remarcan que Icardi optó por no exponerse a situaciones que considera trampas.

Cuestiones patrimoniales y críticas a la imagen pública

El contraataque también apunta al aspecto económico. Según la defensa de Icardi, Wanda Nara “se habría apropiado de casi siete millones de euros”, lo que —afirman— alcanzaría para cubrir con creces los alimentos hasta la mayoría de edad de sus hijas.

El escrito rechaza la imagen pública de Wanda como “madre afligida que necesita trabajar” y sostiene que ese relato “ofende a miles de mujeres que realmente deben salir a trabajar para cubrir necesidades básicas”.

Un conflicto sin tregua

El enfrentamiento judicial y mediático entre Icardi y Nara no muestra señales de moderación. Mientras la mediática celebra la resolución judicial que lo declaró deudor alimentario, el futbolista redobla la apuesta con acusaciones que tensan aún más la disputa familiar y patrimonial.