La conmovedora historia de Marcelo, cuarto semifinalista de MasterChef Profesionales

Este martes finalizó la primera edición de MasterChef Profesionales de Uruguay. Carlos, gran favorito de la competencia, resultó ganador y Carolina quedó en el segundo puesto.

Pero hubo un hombre durante todo el concurso que se ganó el mote de "revelación" de la edición: Marcelo. Este miércoles pasó por La mañana en casa junto a los otros semifinalistas para hablar del fin del ciclo, y contó cómo fueron sus inicios en la cocina.

"Yo lo que veía de niño en la tele era lo que quería hacer, que era cocinar, veía a Narda o a Osvaldo Gross en la televisión y siempre me imaginaba haciendo eso. Quizás siendo niño te imaginás haciendo un programa de televisión de cocina. A medida que fui avanzando en el tema de la cocina siempre lo hice mirando hacia adelante, sabiendo por lo que pasé, pero sin querer volver a pasar por lo mismo. Tratando de superarme y aprendiendo de quien me quisiera enseñar", contó Marcelo Bueno.

"Ver a lo que llegué me da para ponerme feliz. Mi madre quedó viuda cuando yo tenía cuatro años, con cuatro hermanos más grandes que yo. De ahí mi madre por problemas de salud no podía trabajar y arrancó mi hermano más grande, que fue el que nos empezó a mantener. Después nos mudamos para Paysandú, mi hermano mayor se quedó en Montevideo y nos seguía ayudando. A medida que mis hermanos iban creciendo iban haciendo lo que podían con nosotros. Me crié quizás no en el mejor entorno pero siempre teniendo consciencia de que lo malo no estaba bueno. Más allá de que pasamos por millones de cosas fuimos todos por el buen camino, todos trabajadores, emprendedores y con ganas de superarse", continuó su relato.

"Hice la escuela, no pude hacer el liceo por problemas obvios. Me puse a trabajar en una panadería con 13 años. En Paysandú cuidé motos de los 15 a los 18. Ahí volví a Montevideo y mi ex cuñado me ofreció trabajo para arreglar baños y a los meses fue mi primer trabajo en un local de comida mexicana y ahí trabajé cuatro años hasta que me di cuenta de que quería hacer algo más. Hasta que entré a la empresa de catering en la que estoy ahora y mis compañeros hasta el día de hoy, después de ocho años, me hicieron. Confiaron mucho en mí. Teniendo la cabeza abierta el resto es todo tuyo", concluyó.

Tras su paso por MasterChef, Marcelo espera poder tener la oportunidad de estudiar cocina el año que viene.