Kim Kardashian recuperó rápidamente su figura, y a cuatro meses de haber sido madre reveló que está haciendo la dieta Atkins, basada en proteínas, para bajar rápidamente de peso.

Evidentemente conforme con los resultados de este régimen, decidió compartir con sus seguidores una foto a través de las redes sociales, en la que se la ve casi de espaldas, con un traje de baño blanco.

La toma o la malla blanca no la favorecen completamente, pero las críticas no le llegaron solamente por eso, sino porque mucha gente consideró "inapropiado" su look para haber sido madre hace muy poco tiempo.

Los tuiteros llamaron a la mediática "desubicada" y "desagradable", y le exigieron que, ahora que tiene una bebé, deje de actuar de esta manera.