A sus 32 años, Jessica Simpson fue víctima de la prensa del espectáculo debido a los kilos que aumentó durante su último embarazo. Luego de dar a luz a Maxwell Drew, la actriz y cantante adelgazó 27 kilos en cinco meses.
La revista US Weekly le dedicó la portada de su última edición impresa a su "recuperación", aunque la propia Simpson aclara que no es ninguna supermodelo y que jamás será delgada. Mejor.
Según El Universal, Simpson siguió el plan de adelgazamiento por puntos de la conocida empresa Weight Watchers, más duras sesiones de entrenamiento cuatro veces por semana con Harley Pasternak, famoso entrenador de las celebridades.
"Ella es muy determinada, se concentra en lo que hace", dijo Liz Josefsberg, jefa de Weight Watchers.