La creadora de contenido estadounidense Fandy hizo historia en Twitch al convertirse en la primera persona en dar a luz en vivo en la plataforma. El hecho ocurrió durante una transmisión de ocho horas, vista por casi 30.000 personas, en la que la streamer mostró todo el proceso de parto, desde la rotura de fuente hasta el nacimiento de su hija.
La streamer, conocida por su contenido de World of Warcraft, avisó a sus seguidores minutos antes del inicio del trabajo de parto con un mensaje breve: “Rompí fuente así que voy a transmitir en vivo. Se viene un bebé :)”. Poco después, comenzó el stream, inicialmente etiquetado como una sesión de juego, aunque rápidamente se convirtió en un evento inédito para la plataforma.
El parto fue en su casa, rodeada de amigos, familiares y dos parteras profesionales. Según registró el portal Polygon, la transmisión no mostró imágenes explícitas ni contenido sexual, por lo que cumplió con las normas de Twitch, que prohíben material gráfico pero permiten “contenido educativo o médico”. Durante el proceso, Fandy se mantuvo en contacto con el chat desde su teléfono, mientras las parteras la asistían en una piscina inflable preparada para el parto natural.
Tras casi ocho horas, a las 2:45 de la madrugada del 8 de octubre, Fandy dio a luz a Luna Rose, una niña de 3,6 kilos. El llanto de la bebé fue recibido con miles de corazones morados en el chat y un aluvión de felicitaciones de toda la comunidad. Incluso el CEO de Twitch, Dan Clancy, se conectó brevemente para desearle salud y felicitarla.
Pocas horas después, ya recuperándose, Fandy publicó un mensaje en sus redes sociales para confirmar el nacimiento y agradecer el apoyo recibido:
“Transmití mi parto en vivo para mi comunidad, a la que llevo transmitiendo desde hace 10 años. Estoy muy agradecida por la cantidad de personas que se conectaron para compartir este momento especial con nosotros, y profundamente agradecida a mis increíbles amigos que dejaron todo ese día para ayudarme y acompañarme durante todo el proceso”.
En el mismo texto, respondió a las críticas que circularon en redes sociales y explicó su decisión: “Hay miles de partos documentados. Esto no fue diferente: solo se mostró en formato en vivo, incluyendo las partes feas y no tan agradables. Fue una de las cosas más difíciles que he hecho. Elegí un parto en casa porque mi experiencia anterior en el hospital no me gustó: se pierde mucha autonomía. Me aseguré de que fuera un embarazo de bajo riesgo y tuve todo preparado por si había que trasladarme. Mi partera y mi enfermera tienen más de 20 años de experiencia y miles de partos; me sentí muy cómoda con mi elección”.
También aclaró que no lo hizo por dinero ni por fama: “No lo hice por dinero. Ni Bryan ni yo pedimos suscripciones, ni fijamos metas, ni mencionamos bits. Estábamos ocupados. No creo que ni siquiera tuviera las alertas activadas. Los anuncios estuvieron al mínimo, como siempre. Y como esto no será mi contenido habitual, no lo hice para ganar audiencia. No usé a mi hija para beneficio personal: compartí algo íntimo y creé un recuerdo que nunca voy a olvidar”.
Por último, anunció un cambio importante en su carrera como creadora de contenido: “Publiqué esto también en mi Discord, pero lo anuncio acá: he desactivado mi OnlyFans desde hoy. Empecé hace 10 años como streamer, y eso es lo que voy a seguir siendo. Mi nueva etapa empieza ahora. Gracias por ser parte del camino”.
El stream ya acumula millones de visualizaciones en redes y abrió un debate sobre los límites del contenido en vivo y la exposición personal en internet. Mientras algunos lo califican como un momento natural y valiente, otros lo consideran un ejemplo del extremo al que puede llegar el entretenimiento digital.