"Lo que es sorprendente es que mis experiencias no son únicas, las de mis amigos tampoco lo son. Ni las de mis colegas. El problema del abuso a las mujeres es sistémico. Está arraigado en lo cultural", dijo a Variety, según recoge La Nación.

Para ella, recién estamos "arañando la superficie" de una situación que existe desde hace años. "Las estadísticas de mujeres entre 18 y 24 años que han sufrido algún tipo de acoso sexual en el trabajo arrojan números enormes. Si hablás con cualquier mujer, todas tienen una historia para contar".