Contenido creado por Florencia Bengoa
Pantallazo
Duro

Emma Heming sobre Bruce Willis: “El futuro que imaginábamos simplemente se desvaneció”

La esposa de la estrella de Hollywood relató el impacto del diagnóstico de demencia del actor y cómo cambió sus vidas.

29.05.2025 13:16

Lectura: 2'

2025-05-29T13:16:00-03:00
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Emma Heming, la esposa de Bruce Willis, compartió en Las Vegas el duro impacto del diagnóstico de demencia que cambió para siempre la vida de su familia. Durante su participación en el Foro del Movimiento de Mujeres con Alzheimer, la modelo y activista relató cómo fue enfrentar, en 2022, el momento en que escucharon por primera vez las palabras “demencia frontotemporal”.

“Los planes para el resto de nuestras vidas se esfumaron ante nuestros ojos”, recordó Emma. Al salir del consultorio médico, no recibieron más que un folleto y una despedida fría. “Sin plan, sin guía, sin esperanza. Solo conmoción”, expresó con crudeza. Desde entonces, se encontró intentando sostener su hogar, criar a sus dos hijas pequeñas y cuidar al hombre que ama, todo mientras lidiaba con una enfermedad que apenas comprendía.

La demencia frontotemporal (DFT) es una condición neurodegenerativa que afecta a personas menores de 60 años y, actualmente, no tiene tratamiento ni cura. Emma confesó que, en esos primeros momentos, se sintió “perdida, aislada y asustada”. Aseguró que lo que más necesitaba entonces era que alguien le dijera que, aunque parecía imposible, iba a encontrar su equilibrio y salir adelante.

Desde entonces, Heming ha enfocado sus esfuerzos en concientizar sobre esta enfermedad, apoyando legislaciones y campañas en Estados Unidos. “No imaginé este futuro en 2022, pero sí elijo cómo transitarlo con propósito, tal como Bruce siempre ha vivido su vida, y como quiero que nuestras hijas vivan la suya”, afirmó con firmeza.

“Cada camino en el cuidado es único, pero todos comparten el sufrimiento, la resiliencia y el amor”, subrayó.

Más allá del escenario, Emma también abrió su corazón en redes sociales. Conmovida, reconoció que se permite 30 minutos diarios para enojarse y sentir dolor, pero luego vuelve a enfocarse en lo esencial: el amor incondicional. “Me siento bendecida por saber lo que es. Y lo haría todo de nuevo, sin dudarlo, por él”, concluyó.



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