El final de El juego del calamar podría ser “un nuevo comienzo”

Aunque el director Hwang Dong-hyuk insiste en que la tercera temporada de El juego del calamar marcará el cierre definitivo de la serie, Lee Byung-hun —quien interpreta al misterioso líder enmascarado— sugiere que podría tratarse más bien de "un nuevo comienzo".

Durante la presentación de esta última entrega en Londres, el actor surcoreano declaró: “Cuando leí el guión por primera vez, pensé que podía ser un final y al mismo tiempo un nuevo comienzo”. Sus palabras despertaron sonrisas nerviosas tanto del director como de sus compañeros de reparto, Lee Jung-jae (el icónico Jugador 456) y Park Gyu-young, quienes sin embargo consideraron que el cierre es definitivo.

Hwang, que dedicó seis años al proyecto, fue tajante: “Es hora de decir adiós. Nunca imaginé este nivel de éxito, pero ahora necesito avanzar hacia mi siguiente historia”.

La tercera temporada, que se estrena el 27 de junio en Netflix, constará de seis episodios y según Hwang incluirá “nuevos juegos, una narrativa más cercana a la primera temporada y un final loco, demente”.

Originalmente pensada como una segunda temporada de ocho capítulos, la expansión del universo narrativo llevó al director a dividir el cierre en dos partes, dando forma a una tercera entrega que, asegura, “responderá todas las preguntas de forma muy clara”.

Con más de 192 millones de espectadores, El juego del calamar se consolida como una de las series más vistas en la historia de Netflix, solo por detrás de Miércoles y de su propia primera temporada.

La serie, que retrata una brutal competencia de supervivencia bajo una estética perturbadoramente lúdica, ha trascendido el entretenimiento: se convirtió en fenómeno cultural, referencia política y una metáfora global del colapso social.

Un adiós con traje rosa

La actriz Park Gyu-young, nueva incorporación a la historia en el papel de una guardia disidente, compartió su emoción por formar parte del elenco: “De ser fan pasé a ser un personaje central. Estaba feliz de usar esos trajes rosas tan icónicos”.

Lee Jung-jae, por su parte, se mostró agradecido con el impacto que la serie ha tenido en su vida profesional e incluso en el humor digital: “Jamás olvidaré las reacciones del público global ni los memes que han hecho con mi cara”, bromeó.