Conor McGregor volvió a quedar en el centro de una grave polémica pública, esta vez por una serie de acusaciones realizadas por la rapera estadounidense Azealia Banks, quien aseguró que el exluchador de UFC le envió imágenes desnudo sin su consentimiento y la amenazó para que no lo hiciera público.

Según informó Yahoo News, la denuncia se hizo este lunes a través de la red social X, donde Banks compartió varias capturas de pantalla de mensajes directos y fotografías que atribuyó al peleador irlandés. Según afirmó, las imágenes llegaron en el marco de una interacción nocturna no solicitada, y una de ellas lo mostraba “levantando pesas con sus genitales”.

Uno de los mensajes, que Banks acompañó con las fotos, decía: “No seas una rata, porque todas las ratas son atrapadas”.

La artista, conocida por su estilo provocador y confrontativo en redes, afirmó que los mensajes fueron parte de un intento de intimidación y acoso sexual. “¿Cómo vas a acosarme sexualmente con el d* de granjero de papas y encima amenazarme para que no diga nada?”, escribió en un post viral. Y agregó con ironía: “¿No querías ser presidente de Irlanda? Usá protector solar”.

En otra publicación, Banks ironizó sobre las aspiraciones políticas del luchador. “Tratando de postularte a presidente, pero no podés mantenerte fuera de mis DMs… sé serio”.

La cuenta de Banks mantiene las capturas visibles, pero debido a su contenido altamente explícito, los medios evitaron republicarlas.

El escándalo se suma a una larga lista de episodios controvertidos en la vida de McGregor. En 2023, una mujer lo denunció por abuso sexual durante las finales de la NBA, aunque la fiscalía de Florida no presentó cargos. Sin embargo, el caso derivó en una demanda civil aún en trámite.

En 2024, fue fotografiado besando a una mujer en la playa, en medio de rumores sobre su compromiso. Y hace apenas semanas, circuló un video donde se lo ve golpeando a un hombre en una discoteca en Ibiza tras una noche de fiesta.

El excampeón de peso pluma y ligero también fue declarado responsable en un juicio civil en noviembre pasado, cuando un jurado determinó que había agredido sexualmente a Nikita Hand en 2018. La víctima aseguró que McGregor la violó y la asfixió mientras la amenazaba, causándole lesiones graves.

Hasta el momento, ni Conor McGregor ni la UFC han emitido declaraciones públicas sobre las acusaciones de Banks. La rapera, en tanto, continuó publicando mensajes durante la jornada, desafiando al luchador a que niegue los hechos y exigiendo que sus patrocinadores actúen.

¿Creés que le tengo miedo a un cocainómano con bata de baño y orejas de coliflor? Soy de Harlem. Probame”, escribió.

El escándalo ha reavivado el debate sobre el comportamiento de celebridades en redes, el uso del poder en contextos de acoso sexual y la falta de consecuencias institucionales cuando los acusados son figuras de alto perfil.

Mientras el caso gana repercusión global, crecen las presiones para que las organizaciones que respaldan a McGregor rompan el silencio y tomen posición frente a lo denunciado.