Una menor murió por obesidad, la Justicia condenó a la madre y va a por el padre

Kaylea Louise Titford, que sufría de espina bífida, tenía 16 años cuando murió en su casa en Treowen, País de Gales, en octubre de 2020.

Su madre, Sarah Lloyd-Jones, compareció el pasado 12 de diciembre ante una corte local y se declaró culpable de “homicidio involuntario por negligencia grave” y de causar la muerte de la adolescente. Según informa el periódico local Powys County Town, en una instancia judicial anterior la mujer había negado el delito.

Lloyd-Jones admitió que incumplió con sus deberes de cuidar adecuadamente de su hija discapacitada y que era “razonablemente previsible” que esa circunstancia condujera “a un riesgo grave y evidente de muerte”.

El juez Rhys Rowlands le dijo a Lloyd-Jones que “todas las opciones de sentencia estarán abiertas”, y que su declaración de culpabilidad podría ser considerada como un factor atenuante. La mujer quedó en libertad bajo fianza y esperará así la sentencia, dictamen que tendrá lugar una vez que culmine un segundo juicio acerca del mismo caso: el de Alun Titford, padre de Kaylea.

De acuerdo con el citado medio, el hombre niega los mismos cargos que Sarah admitió. Afrontará un juicio de dos semanas, que comenzará el martes 17 de enero de 2023.

En ambos juicios, la acusación es la misma. Se alega que entre el 24 de marzo y el 11 de octubre de 2020, los responsables de la menor no se aseguraron de satisfacer sus necesidades dietéticas, lo que provocó una obesidad mórbida. Además, se les acusa de no procurar que ella hiciera suficiente ejercicio, tuviera una adecuada higiene y un entorno de vida seguro y limpio.

Si bien la madre ya fue encontrada culpable, su defensa legal procurará un informe psicológico favorable antes de que se emita la sentencia.