El foco ígneo se originó en unas tres hectáreas de campo ubicadas en el km. 30 de la Ruta 36, según informa la Jefatura de Policía de Canelones.

De acuerdo con dicha crónica, el propietario de dicha tierra intentó sofocar las llamas por su cuenta y al parecer cayó inconsciente por la inhalación de humo, sufriendo luego quemaduras en todo el cuerpo.

Fue asistido posteriormente por personal médico, pero sólo fue posible constatar su deceso.