Terrenos con “apariencia de abandono”: organización estafó más de 50 veces en Canelones

Ocho personas fueron condenadas a prisión por estafar a través de Marketplace con terrenos en la costa de Canelones. Entre los enviados a la cárcel aparecen la dueña de una inmobiliaria y una escribana, quienes cumplían un rol fundamental en la organización criminal, según consta en el acuerdo abreviado al que llegaron con Fiscalía.

La operativa consistía en que los involucrados “seleccionaban” terrenos con “apariencia de abandono” por parte de sus propietarios en la costa canaria y solicitaban información registral a la escribana, como forma de confirmar que estuvieran aptos para realizar la maniobra delictiva.

Una vez que el lugar era elegido, otro de los involucrados limpiaba el terreno e inmediatamente se ofrecía su “traspaso”. Esto implica ceder los derechos posesorios, algo que promocionaban a través del Marketplace de Facebook. Cuando la operación se concretaba, es decir, cuando alguien se interesaba en la oferta y se cerraba el negocio, la escribana firmaba la cesión de derechos del terreno y declaraba datos irreales.

En ocasiones, en el momento en que las víctimas realizaban el pago, que en promedio era de US$ 5.000, y se disponían a ocupar el terreno, eran denunciados por los dueños legítimos. Las operaciones, según las investigaciones de la Fiscalía, fueron varias en el mismo día. De acuerdo con la documentación que firmaba la escribana, solían estafar hasta a dos personas por día.

De esta manera, el Ministerio Público pudo identificar que se llegaron a realizar cerca de 50 estafas de este tipo, todas protagonizadas por los sentenciados. Es más, este tipo de actividad se daba con tanta frecuencia que llamó la atención del Departamento de Jurídica de la Intendencia de Canelones, que en 2020 y 2021 realizó las denuncias correspondientes ante la Justicia.

“Se ha detectado una verdadera forma para delinquir creada para la operativa reseñada”, indica el proceso abreviado al que accedió Montevideo Portal. Con respecto a la dueña de la inmobiliaria, se pudo determinar que la zona donde operaba mayoritariamente era en San Luis y alrededores.

Los abogados penalistas Marcos Pacheco y Mariana de León fueron los encargados de defender a la escribana y a la propietaria de la inmobiliaria. Los defensores lograron que la primera fuera condenada a tres años de prisión, de los cuales los primeros 12 meses los deberá cumplir en la cárcel y el resto se sustituye por régimen de libertad a prueba. Los delitos que se le adjudican son asociación para delinquir en reiteración real, falsificación ideológica y un delito continuado de estafa.

Con respecto a la otra mujer, titular del negocio inmobiliario, fue condenada a un año de prisión que se sustituye por libertad a prueba por un delito de asociación para delinquir, según se detalla en el documento.