Curiosidades

De armas entregar

Sorpresa en campaña de desarme en Argentina: apareció una metralleta

Se paga de 3.000 a 9.000 pesos argentinos por la entrega de armas.

04.05.2021 11:38

Lectura: 3'

2021-05-04T11:38:00
Compartir en

El Ministerio de Seguridad de la provincia argentina de Santa Fe inició una campaña de desarme voluntario de la ciudadanía, con el fin de reducir la cantidad de armas entre la población.
Las autoridades destacaron que entre las armas entregadas la mayoría eran pistolas y revólveres, así como algunas ramas de caza y rifles antiguos.

La entrega es anónima, por lo que es posible deshacerse de armas "sin papeles". Por esa razón, llamó la atención que muchas de las personas que se acercaron a entregar armas hayan sido mujeres, ya que el 98% del armamento registrado en la provincia está a nombre de varones. También lo jubilados se presentaron en buen número.

"La mujer suele ser más sensible, porque entiende que el arma termina siendo un riesgo para su hijo o marido, y el jubilado la posee y no sabe cómo desprenderse, porque no tienen la tenencia legal. Entonces el Estado le da una posibilidad a través de una amnistía penal y administrativa, de modo que pueda acercarse y si lo paran en la calle puede argumentar que va al punto móvil, la entrega de forma anónima y además percibe el incentivo económico que se da a través de un cupón que luego canjea en el banco", explicó el titular de la Agencia Provincial de Prevención de Violencia con Armas de Fuego, Lautaro Sappietro, en declaraciones recogidas por el periódico La Capital.

La gran sorpresa para los funcionarios encargados de recibir las armas llegó cuando un hombre se acercó para entregar un subfusil FMK-5.

Se trata de un arma de guerra de manufactura argentina variante de la FMK-3, de amplio uso entre las tropas del país vecino y también en el nuestro.

La versión FMK-5 fue concebida en la década de 1990 como de "uso civil", autorizándose para tiro deportivo y escoltas privados. Sin embargo, un posterior cambio normativo inhabilitó esos usos.
De acuerdo con el citado medio, el propietario del arma era un ex funcionario de las fuerzas de seguridad y la tenía con su documentación y muy bien conservada. Sin embargo, y dado que la nueva legislación no le permite poseerla ni venderla, optó por entregarla a cambio de algo de dinero.

Dentro del dinero que se da a cambio de la recepción del arma, hay un grupo de 3 mil pesos que integran las pistolas calibre 22, luego lo sigue otra franja de las 9 milímetros que significan 4.500 pesos, y el grupo de 9 mil pesos que constituyen las armas de las fuerzas de seguridad.

Las armas recibidas son destruidas en una prensa, salvo aquellas que estén requeridas por la Justicia, algo que se comprueba en el mismo momento, algo que, según Sappietro, ocurre en pocas ocasiones.