Contenido creado por Federico Medina
Política

Humo sobre el agua

Sartori propone que no se pueda fumar en plazas públicas con juegos y espacios deportivos

El nuevo proyecto de ley del senador blanco busca combatir la contaminación ambiental y avanzar sobre las políticas antitabaco.

24.10.2022 17:33

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2022-10-24T17:33:00-03:00
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“Al fumar, el humo de tabaco introduce al medio ambiente hasta 4.000 sustancias tóxicas que son perjudiciales, no solo para el fumador sino para todo el medio ambiente. En este sentido, cada cigarrillo está provisto de un filtro fijado a la colilla, y adaptado para retener parte de las sustancias tóxicas que permanecen en el filtro, como nicotina, alquitrán y arsénico”, dice el senador blanco Juan Sartori en la exposición de motivos del proyecto de ley que presentó en el Senado, en conjunto con la agrupación No más Colillas Uruguay.

Con esta propuesta legislativa, Sartori, quien además integra de la Comisión de Medio Ambiente, busca proteger el medioambiente y establecer sanciones para quienes arrojan colillas en zonas no destinadas a la disposición de estos residuos.

Asimismo, vuelve obligatoria la instalación de ceniceros específicos en las afueras de los establecimientos donde haya importante circulación de personas, como en centros comerciales, bancos, hospitales, restaurantes, boliches o paradas de ómnibus, así como oficinas públicas y privadas.

“El proyecto supone dar un paso más en lo que hace a la gestión integral de residuos promovida desde la Ley N° 19.829, especialmente considerando el interés general comprometido en la conservación del ambiente”, afirma Sartori en el documento.

Por otra parte, el senador nacionalista pretende avanzar en las medidas de lucha contra el tabaquismo, al proponer la ampliación del alcance de la prohibición establecida en la Ley N° 18.256, para aquellos espacios destinados al uso de menores, como plazas públicas con juegos, zoológicos, reservas de fauna y flora, parques de diversiones y atracciones, así como espacios dedicados a las actividades deportivas, entre otros.

“El objetivo principal de esta iniciativa es posicionar a Uruguay entre los pioneros en la región en la gestión de residuos de colillas en la ciudad, y sumar esta nueva regulación a los logros ya obtenidos en lucha contra el tabaquismo”, expresó Sartori. 

Además, asegura que la multa no es el objetivo de la norma. Su proyecto busca desestimular y persuadir a las personas a que no arrojen este tipo de residuos en las calles y disponerlos en los recipientes adecuados para ello.

“Esto no se logrará únicamente a través de la aprobación de la norma que se propone, sino que requerirá del trabajo conjunto con los gobiernos departamentales y de la generación de conciencia ambiental en la sociedad, pero es una señal de impulso desde el Poder Legislativo”, asegura el senador.

Según se establece en el proyecto, la fiscalización de la conducta y la imposición de sanciones —que pueden ir de 1 a 10 UR para las personas, y de 10 a 100 para los establecimientos comprendidos en la norma que no coloquen los colilleros— quedará a cargo del Ministerio de Ambiente, y el producido de las multas aplicadas por infracción de esta norma será destinado al Fondo Nacional de Gestión de Residuos (Fonagres), creado por el artículo 45 de la Ley N° 19.829, destinado al reciclaje. 

Asimismo, el proyecto contempla que instituciones públicas o privadas interesadas en la gestión ambiental de los cigarrillos, colillas y/o filtros de cigarrillos, puedan realizar convenios con diferentes establecimientos para la recolección y reciclaje de estos desechos. 

En la exposición de motivos, el senador hace referencia a distintas investigaciones científicas sobre el tema. Por ejemplo, señala que, de acuerdo a la organización Ocean Conservancy, un solo filtro basta para contaminar entre 8 y hasta 50 litros de agua, ya que conserva la mayoría de la nicotina y el alquitrán del cigarrillo.

Del mismo modo, recuerda que, en nuestro país, y de acuerdo a los datos extraídos de la última encuesta de hogares del INE, el 20% de la población adulta consume tabaco, “lo que representa aproximadamente 500.000 personas que se identifican como fumadoras”. Y si se considera que un fumador promedio consume hasta diez cigarrillos diarios, se generan cinco millones de residuos de colillas por día.

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