Por caída de fondo ganadero, mujer no pudo pagar operación de su madre: murió esperando

La historia de Claudia (nombre ficticio) tuvo varios altibajos en los últimos años, pero ella define que el peor momento fue cuando Alejandro Berrutti —director y fundador de Portfolio Capital— les comunicó a los inversores que no podría seguir pagando los dividendos.

Lo que siguió ya es conocido: cientos de personas denunciaron penalmente a Berrutti, la empresa ingresó en concurso de acreedores y ahora la síndica Stella Borja debe decidir si declara a los denunciantes como damnificados o como inversores, lo que los colocaría al final de la lista de quienes cobrarán cuando termine el proceso.

Claudia vendió una casa por US$ 310.000 y puso todo el dinero en Portfolio Capital, integrada por Oro Rojo, Reina Vaca y Berrutti & Argenti. En junio, la mujer contó en diálogo con El Observador que había llegado a la firma del empresario tras ver una publicación en Instagram.

Se reunió con Berrutti y él le aseguró que su dinero estaría bien cuidado, que se quedara tranquila y que podría hacerlo crecer gracias a los intereses que la compañía prometía pagar.

El objetivo de la inversión no era solo obtener ganancias, sino también pagar una intervención quirúrgica para su madre, que era de vida o muerte. La cirugía debía realizarse en Estados Unidos en julio, pero nunca se concretó.

Claudia había pactado el día y la hora, pero no llegó a realizar el pago y la intervención no se llevó a cabo, lo que derivó en la muerte de su madre. La mujer vio dos veces a Berrutti después de que dejara de pagar. En ambas ocasiones, encuentros cara a cara, él no le dio respuesta.

“Yo quería algo de dinero para poder conseguir que le hicieran la operación a mi madre. Pero la última vez que vi a Berrutti, literalmente, se me rió en la cara. Ahora ya es tarde, porque mi madre falleció”, relató Claudia a Montevideo Portal.

La damnificada presentará las correspondientes demandas, tanto civil como penal, aunque sabe que nadie le devolverá la vida a su madre. Para ella está claro que detrás de la operación de Portfolio no está solo Berrutti, sino también su cuñado, Pablo Argenti, y su esposa, María José Argenti.

“Yo quedé en cero. Vendí ese apartamento y el dinero fue íntegro para la inversión. A raíz de todo esto, tengo que pagar medicamentos y no sé cómo voy a hacer, porque he tenido que afrontar varios gastos”, sostuvo Claudia.

En una reunión realizada a mitad de año, Berrutti propuso a los afectados un acuerdo en el que prometía devolver el total de lo invertido en 12 años. “Yo ya sabía que no iba a recuperar a mi madre, que había muchas chances de que muriera, por eso le pedí ayuda. Pero no se apiadó… no se humanizó”, lamentó.

Por último, la damnificada considera que es necesario que el grupo de afectados “se mueva más”. “La Justicia tiene que saber que acá hay gente que espera respuestas, que no es el mismo caso que otros fondos, pero que nuestro dinero vale lo mismo”, concluyó.

Sigue operando

En el marco del proceso concursal, se ordenó que Berrutti dejara de operar hasta que la Justicia tomara una determinación. Sin embargo, algunos de los damnificados aseguran, en sus reclamos formales, que el empresario sigue operando a través de otras compañías y también empresas familiares. 

Este es uno de los temas que los abogados querellantes hablarán con el fiscal Rodríguez el próximo 27 de octubre, cuando celebrarán la primera reunión luego de que se le asignara la causa.

Uno de los negocios, a través de los que sigue operando Berrutti, es la exportación de corazones de vacunos a una empresa de Perú llamada Tucson Food. A su vez, algunos abogados de damnificados recibieron documentación de que el empresario ha vendido ganado en algunas ferias, así como también ha comprado animales.