Contenido creado por Sebastián Rodríguez
Entrevistas

De la mano de mamá y papá

Padres separados: consejos para decidir qué hacer en las fiestas

Padres separados: ¿qué hacer en las fiestas? Fanny Berger aconseja ''alternancia'' y que la decisión sea de los adultos para evitar marear al niño.

21.12.2015 08:13

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2015-12-21T08:13:00-03:00
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Seguramente sea un dilema al que se han enfrentado muchos de los adultos separados y que tienen hijos en común. A pocos días de Navidad y año nuevo, analizamos con la psicóloga Fanny Berger cuáles son las conductas más "saludables" a la hora de decidir cómo pasar las fiestas cuando los padres están separados.

Según entiende la autora y psicóloga Berger, decidir qué hacer es un "tema que concierne al mundo adulto" porque "a los niños no se los puede cargar con una decisión tan difícil".

Es entendible que los padres quieran escuchar a sus hijos y sentir que son buenos padres, pero ¿hasta qué punto es beneficioso dejarlos tomar decisiones?

"El niño, si decide estar una fiesta con el padre, puede estar con él y que le venga la culpa por no estar con la madre. Entonces, decida lo que decida, puede sentir que está abandonando al otro padre", explica Berger. En este sentido, señala que es imprescindible que los padres lleguen a un acuerdo.

"Tiene que haber alternancia, primar el sentido común, el amor por los hijos y los acuerdos".

¿Cuántos años llevás separado?

A la hora de tomar decisiones como estas, no es lo mismo si la pareja está recién separada o si ya pasaron varios años. ¿Por qué? Porque es "muy importante cómo cada miembro de la pareja elaboró el divorcio. Porque el divorcio es un duelo y, como tal, lo podés hacer o no".

De esta forma, el primer paso es que "cada padre se mire y observe cómo se encuentra afectivamente sobre su divorcio", analizar si "todavía siente rabia, despecho, si se siente desvalorizado, engañado".

Siendo así, se evita que "los padres tomen a los chicos como rehenes". "A veces, sin darse cuenta y sin intención, los padres están tan enojados y tan doloridos que toman a los chicos como rehenes de su situación", apunta Berger. Con esto, se intenta evitar que uno de los padres intente castigar al otro, por sus problemas personales, apartándolo de sus hijos durante las fiestas.

"Es normal que cuando uno todavía no elaboró el duelo, sienta rabia, resentimiento, dolor. Y uno puede tener fantasías de venganza; pero no por intermedio de los hijos".

Llegar a acuerdos por el bien de los niños: la separación no es lo peor

Lo más importante es que los padres piensen en "el bien de los niños", porque muchas veces sucede que discuten y se olvidan de eso, entiende Berger.

"Todo el mundo dice 'ay pobre los niños con el divorcio', pero no es el divorcio en sí lo traumático, sino las actitudes de los adultos, que pueden llegar a lastimar mucho más y a causar más daño que el divorcio", apunta la psicóloga.

"Lo más importante en los niños es que ellos vean padres calmos y felices. Si los padres toman decisiones por despecho o por enojo, los hijos no los verán ni felices, ni calmos".

Cuando los hijos son adolescentes

En este caso, la especialista reflexiona que también es "una decisión de los padres". No obstante, "uno puede escuchar más" y preguntar sobre los planes que tienen los adolescentes.

"Uno puede preguntarles qué planes tienen y en base a eso planificar", señala Berger.

Padres separados que igual se juntan: ¿falsas esperanzas?

Algunos padres separados deciden olvidar todas sus diferencias durante las fiestas y juntarse a pasar todos juntos por el "bien de sus hijos". Sin embargo, hacerlo puede tener un efecto negativo en los niños.

A juicio de Berger, situaciones así pueden "marear a los niños". Muchas veces el divorcio "es un alivio para los niños, porque los padres se vivían peleando y había mucha agresividad". No obstante, siempre queda "una fantasía, un deseo de que los padres vuelvan a estar juntos. Y eso perdura por muchos años y es normal".

"Si después de una separación reciente, de un año o dos, los padres se juntan en las fiestas, es un doble mensaje: porque están separados pero en realidad se juntan en esa fecha, y así el niño genera falsas expectativas", reflexiona Berger.

No hay recetas

Finalmente, la especialista recuerda que "hay que pensar en los chicos y no en las cosas que me quedaron pendientes con mi ex".

No obstante, no hay que olvidar que cada pareja es un mundo y que por lo tanto "no hay recetas".

Por consultas a la especialista se puede ingresar a su sitio web: fannyberger.com.uy

Sebastián Rodríguez | Montevideo Portal
sebastian.rodriguez@montevideo.com.uy